DIOS TE HA ENVIADO

No te pido que los quites del mundo, sino que los protejas del maligno. Ellos no son del mundo, como tampoco lo soy yo. Santifícalos en la verdad; tu palabra es la verdad. Como tú me enviaste al mundo, yo los envío también al mundo.  Y por ellos me santifico a mí mismo, para que también ellos sean santificados en la verdad. -Juan 17:15-19 NVI

Cuando Nick y yo nos casamos, no habían aplicaciones para navegar. Leíamos mapas de papel que cuando se desdoblaban, bloqueaban todo el parabrisas y nunca los podías doblar a su forma original. ¡Hacía los viajes muy estresantes! Cuando llegaron los dispositivos como el Navman, me sentí aliviada, como si hubiésemos sido liberados de una especie de esclavitud a la navegación. Con una simple compra, tuvimos una paz que no conocíamos. 

Pero no era un Navman. Era una Navwoman, porque la voz del dispositivo era una mujer con una suave manera de hablar: "En la rotonda, toma la segunda salida," y cuando te pasabas de la salida, decía con voz ronca, entrecortada, "Redirigiendo... redirigiendo".

Inicialmente, pensé que era genial, y le puse por nombre Matilda. ¡Pero entonces comencé a notar que Nick obedecía todo lo que decía! No se irritaba cuando ella le decía que había cometido un error o que hiciera un giro en "U". Él simplemente obedecía. Yo estaba en shock. ¡A este hombre le di dos hijos y él aceptaba las direcciones de ella más que las mías! 

Bueno, me encargué de Matilda. Cuando me decía que girara a la izquierda con voz suave como mariposa, yo decía: "No". Y manejaba directo, pasando el giro. Me encantaba cuando ella se ponía muy confusa y su pantalla se tornaba blanca como la nieve. 

A pesar de mi loca reacción hacia la máquina, no puedo negar que a veces era reconfortante. Si estábamos perdidos, sabía cómo guiarnos al camino correcto. Si estábamos en una ciudad que no era conocida, sabía cómo ayudarnos a navegar calles de un solo sentido y desvíos por construcción. Dondequiera que estuviéramos, ella sabía cómo llevarnos en la dirección correcta, sin importar cuánto nos hubiésemos equivocado.

¿No es esto lo que Dios desea hacer por los que están perdidos? ¿No es esto por lo que somos enviados a un mundo perdido y quebrantado? PERDIDO no es un estado en el cual Dios quiere que alguien permanezca. Según pasas tu día, busca a quién puedas redirigir. Busca si encuentras los perdidos que Dios te envió a que guiaras.

ORACIÓN

Padre Celestial, sé que es tu voluntad que cada persona llegue a conocerte y conozca tu profundo amor. Elevo en oración a ti a __________________, orando para que él/ella sea encontrado/a en ti. Úsame, Señor, para ayudarlo/a a que sea redirigido/a, que él/ella se entregue a ti, confiándote totalmente su corazón. En el nombre de Jesús te lo pido, amén.

Adaptado de 20/20: Seen.Chosen.Sent por Christine Caine. Derechos de autor © 2019 por Christine Caine. Reimpreso con el permiso de Lifeway Women. Todos los derechos reservados.