Creado: Escuela SecundariaMuestra

Presta atención a la gente que te rodea esta semana. En la escuela, en la iglesia, en tu equipo, incluso con los extraños que pasan por la calle. Cuando las notes, recuerde la verdad que el escritor compartió con nosotros en 1 Juan: Cada uno de ellos es un hijo de Dios. Cuando vemos a los demás de esa manera, debería cambiar la forma en que los tratamos, pensamos en ellos y hablamos con ellos. Porque como hijos de Dios, todos somos parte de una familia. Eso es lo que hace que amar a otros sea más fácil de hacer. Mientras prestas atención a las personas que te rodean esta semana, tómate un momento para orar por quienes se cruzan en tu camino. Pídele a Dios que te ayude a verlos y ámalos como a sus hijos.