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Valiente para descansar en Dios

LECTURA: Hebreos 4:9-10; Salmo 116:7; Jeremías 6:16

DEVOCIONAL: Hebreos 4:9-10

¿Alguna vez has tenido uno de esos días en los que milagrosamente has sido bendecida con unos minutos extra en los que no tenías nada urgente que hacer y pudiste usar ese tiempo para tomar una siesta? Hay algo realmente dulce en darte permiso para descansar, como un niño, en el medio del día. 

Ese es el mismo tipo de descanso en Dios. Un descanso dulce, especial, santo. Quizás no sea una siesta, pero sí una calma de espíritu que viene de confiar en Dios y en Su Soberanía en tu vida. Podemos descansar pacíficamente al saber que Dios tiene todo bajo control. 

El equipo favorito de baloncesto de mi hijo jugó algunos partidos esta temporada sin sus jugadores estrella en el primer periodo. Era algo inusual pero estratégico. El entrenador dejaba a los jugadores estrella fuera para que pudieran descansar y jugar con más fuerza en la parte final del juego. Los jugadores estrella podían descansar, confiar en que los otros jugadores del equipo encaminarían al equipo hacia el éxito. Dios hace lo mismo por nosotras, y podemos experimentar el descanso especial cuando somos lo suficientemente valientes para confiar en Él. 

Padre, gracias por el descanso especial que tienes para mí. Gracias por darme el ejemplo de descansar después de crear el mundo. Ayúdame a seguir tu ejemplo y descansar. Eres soberano y puedo confiar en Ti. Amén.