Devocional diario de Rick WarrenMuestra

Dios enseña a crear un plan paso a paso

Eliezer diseñó un plan simple pero bien pensado para encontrar a la esposa de Isaac. Llevó diez de los camellos de Abraham, cargados con muestras de lo mejor de todo lo que Abraham poseía. Viajó hasta Nahor y luego hizo que los camellos se arrodillaran fuera de la ciudad, junto a un pozo.

Entonces Eliezer oró: “Oh Señor, Dios de mi amo, Abraham, te ruego que me des éxito en esta misión. Mira, aquí estoy, parado junto a este manantial, y esta es mi petición: cuando venga una joven a sacar agua, yo le diré: ‘Por favor, deme de beber un poco de agua de su cántaro’; si ella dice: ‘Sí, beba usted, y también sacaré agua para sus camellos’, que sea ella la que has elegido para ser la esposa del hijo de mi amo" (Génesis 24:42-44 NTV).

Ahora bien, esto era un gran problema porque los camellos pueden beber mucha agua. Así que eso significaba que la mujer tendría que sacar 20, 30, tal vez 40 cubos de agua. Eso es un compromiso serio. Y ese es el tipo de mujer que buscaba Eliezer: una mujer amable, generosa con corazón de sierva, dispuesta a ayudar a alguien necesitado y que hiciera un esfuerzo adicional.

¿Y sabes qué? Su plan funcionó. Una mujer llamada Rebeca le ofreció a Eliezer un trago de agua y luego se ofreció a darle de beber a sus camellos.

Hazte dos preguntas: 1) ¿Cómo pienso llegar una vez que sepa cuál es mi meta? 2) ¿Cuánto tiempo me llevará?

Puedes ir a la deriva por la vida o ella te puede dirigir si te tomas el tiempo de pensar dónde quiere Dios que estés. ¿Vale la pena el esfuerzo por tu futuro? Sí, ¡totalmente!