Infunda pasión espiritual en su matrimonioMuestra

"Dependencia divina"

Si su matrimonio y su familia parecen una broma o tiene la sensación de que están al borde del caos, no hay nada que Dios no haya visto o sea capaz de enmendar. Muchas de las cosas que los cristianos están enseñando en estos días se tratan de desarrollar "nuestros" dones, mejorar "nuestros" talentos, alcanzar "nuestro" potencial; sin embargo, la enseñanza y el ejemplo de Jesús se tratan de someternos al trabajo del Espíritu Santo. Permitamos que el matrimonio nos enseñe a confiar en el Espíritu Santo. Él ha demostrado su valía. Si verdaderamente queremos transformar nuestros matrimonios, debemos aprender la gloria de la dependencia divina.

Dios nunca nos llamará a hacer algo sin darnos todo lo necesario para terminar la tarea. Es probable que no sea todo lo que pensamos que necesitamos, pero será todo lo que necesitamos. Esto no significa que el trabajo será fácil. Pero Dios nos promete a través de Isaías: "Él da poder a los indefensos y fortaleza a los débiles" (Isa. 40:29 NTV).

No pase por alto este pensamiento porque es crucial: Isaías 40:29 da por sentado que Dios nos llamará a diferentes tareas para las que carecemos de suficiente poder por nuestra cuenta.

El "secreto", entonces, para un matrimonio verdaderamente sagrado es en realidad una persona, el Espíritu Santo que Dios prometió. Ya que Dios es un Dios relacional (pues suplió nuestra necesidad de salvación enviando a Su Hijo), no debería de sorprendernos que Él supla nuestra necesidad de transformación al enviarse también Él mismo en la persona de Su Espíritu Santo.

Puesto que el matrimonio es uno de los actos más profundos de adoración que dos creyentes puedan compartir, es imposible estar casado de manera sagrada sin tener al Espíritu Santo activo en nuestras vidas, ayudándonos a entender lo que significa amar, dándonos el poder para amar, redarguyéndonos cuando fallamos en amar, renovando nuestros corazones cuando nos cansamos de amar, y derramando esperanza cuando nos desalentamos de amar.

* ¿Usted se apoya en el Espíritu Santo para fortalecerse a sí mismo y a su matrimonio? ¿En qué situación específica carecía de habilidades, pero fue fortalecido por el Espíritu Santo?