Usted Tiene DonesMuestra

El Fruto del Espíritu: La humildad es un fruto del Espíritu Usted probablemente ha escuchado las famosas palabras de Jesús en el Sermón del Monte “si alguien te pega en la mejilla derecha, ofrécele también la otra” (Mateo 5:39). Eso es terriblemente difícil, ¿no le parece? Ciertamente fue difícil para los trabajadores de los derechos civiles en las décadas de 1950 y 1960. Los que marcharon al sur con el Dr. Martin Luther King hallaron realmente difícil ser amables cuando se encontraron rodeados por látigos, mangueras contra incendios, odio y violencia. Pero los derechos civiles les llegaron a los estadounidenses negros no por las armas ni la violencia, sino por el amor. Parece que en este país todos admiran a las personas agresivas y rudas. Pero usted, permita que el Espíritu del Señor produzca hoy su santo fruto y lo guíe a palabras y acciones humildes. “Lo que el Espíritu produce es amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, humildad y dominio propio” (Gálatas 5:22,23).El Fruto del Espíritu: La humildad es un fruto del Espíritu Usted probablemente ha escuchado las famosas palabras de Jesús en el Sermón del Monte “si alguien te pega en la mejilla derecha, ofrécele también la otra” (Mateo 5:39). Eso es terriblemente difícil, ¿no le parece? Ciertamente fue difícil para los trabajadores de los derechos civiles en las décadas de 1950 y 1960. Los que marcharon al sur con el Dr. Martin Luther King hallaron realmente difícil ser amables cuando se encontraron rodeados por látigos, mangueras contra incendios, odio y violencia. Pero los derechos civiles les llegaron a los estadounidenses negros no por las armas ni la violencia, sino por el amor. Parece que en este país todos admiran a las personas agresivas y rudas. Pero usted, permita que el Espíritu del Señor produzca hoy su santo fruto y lo guíe a palabras y acciones humildes. “Lo que el Espíritu produce es amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, humildad y dominio propio” (Gálatas 5:22,23).