La verdad que triunfaMuestra

 Podemos engañarnos a nosotras mismas 

Lectura: Jeremías 17:9-10; 1 Corintios 3:18, Ezequiel 36:26

DEVOCIONAL: Jeremías 17:9-10

¿Has estado alguna vez en un carnaval? Dentro de las atracciones está el salón de los espejos en el que puedes probarte que el engaño viene en muchas formas. Por la mera refracción de la luz, cómo te ves cambia de manera drástica. 

La Escritura nos advierte de que el corazón es engañoso sobre todas las cosas. Nuestras emociones no pueden ser confiables. Aun así, a menudo reaccionamos de acuerdo a cómo nos sentimos. Piensa en las decisiones que has hecho basada en tus emociones esta semana. Si tuvieras otra oportunidad, te replantearías algunas de esas decisiones. 

Nuestro Padre Celestial comprende que a veces fallamos. Porque nos ama, nos redime. A través de Jesús, tenemos perdón cuando nos engañamos a nosotras mismas y nuestra relación con Dios es restaurada. Dios nos da un nuevo corazón y nos permite aprender de nuestros errores para que crezcamos en sabiduría.

¿De qué manera has confiado en tus emociones en lugar de en los hechos? ¿Te están alejando tus emociones?

Padre Dios, gracias por darnos un nuevo corazón en Cristo. Ayúdame a confiar en Tu sabiduría para guiarme en lugar de que mis emociones me guíen. Gracias por cómo sigues amándome incluso cuando lucho. Eres un Dios bueno. En el nombre de Jesús, amen.