Salmos 31:1-8
Salmos 31:1-8 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
En ti, SEÑOR, busco refugio; jamás permitas que me avergüencen. Por tu justicia, líbrame. Inclina a mí tu oído y acude pronto a socorrerme. Sé tú mi roca de refugio, la fortaleza de mi salvación. Guíame, pues eres mi roca y mi fortaleza, dirígeme por amor a tu nombre. Líbrame de la trampa que me han tendido, porque tú eres mi refugio. En tus manos encomiendo mi espíritu; líbrame, SEÑOR, Dios de la verdad. Odio a los que adoran ídolos vanos; yo, por mi parte, confío en ti, SEÑOR. Me alegro y me regocijo en tu amor, porque tú has visto mi aflicción y conoces las angustias de mi alma. No me entregaste al enemigo, sino que me pusiste en lugar espacioso.
Salmos 31:1-8 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
1 (2) Dios de Israel, tú eres un Dios justo; no me dejes pasar vergüenza. ¡Sálvame, pues confío en ti! 2 (3) Préstame atención, ven pronto a socorrerme. Protégeme como una enorme roca, rodéame como una alta muralla. 3 (4) ¡Tú eres la roca que me protege! ¡Tú eres la muralla que me salva! Guíame y dirígeme, pues así lo prometiste. 4 (5) No me dejes caer en la trampa que me han puesto mis enemigos; ¡tú eres mi protector! 5 (6) Tú eres un Dios fiel. ¡Sálvame! ¡Mi vida está en tus manos! 6 (7) Odio a los que adoran ídolos, pues estos no sirven para nada; ¡pero yo en ti confío! 7 (8) Tu bondad me llena de alegría, pues me viste sufrir y me cuidaste, 8 (9) me libraste de mis enemigos, y me diste libertad.
Salmos 31:1-8 Reina Valera Contemporánea (RVC)
Señor, yo confío en ti; no permitas nunca que sea yo avergonzado. ¡Ponme a salvo, pues tú eres justo! ¡Inclínate a escucharme! ¡Ven pronto en mi ayuda! ¡Sé tú mi roca fuerte, la fortaleza que me salve! Ciertamente, tú eres mi roca y mi castillo; guíame; encamíname por causa de tu nombre. Sácame de la red que me han tendido, pues tú eres mi refugio. En tus manos encomiendo mi espíritu; ¡ponme a salvo, Señor, Dios de la verdad! Señor, yo confío en ti, pero odio a los que adoran ídolos huecos. Yo me lleno de alegría por tu misericordia, pues tú has tomado en cuenta mi aflicción y conoces las angustias de mi alma. No me has puesto en manos de mi adversario; más bien, me has plantado en lugares amplios.
Salmos 31:1-8 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
1 (2) Señor, en ti busco protección; ¡no me defraudes jamás! ¡Ponme a salvo, pues tú eres justo! 2 (3) Dígnate escucharme; ¡date prisa, líbrame ya! Sé tú mi roca protectora, ¡sé tú mi castillo de refugio y salvación! 3 (4) ¡Tú eres mi roca y mi castillo! ¡Guíame y protégeme; haz honor a tu nombre! 4 (5) ¡Sácame de la trampa que me han tendido, pues tú eres mi protector! 5 (6) En tus manos encomiendo mi espíritu; ¡rescátame, Señor, Dios de la verdad! 6 (7) Odio a los que adoran ídolos inútiles. He puesto mi confianza en el Señor. 7 (8) Tu amor me trae gozo y alegría. Tú has visto mis tristezas, conoces mis aflicciones; 8 (9) no me entregaste en manos del enemigo; ¡me hiciste poner pie en lugar seguro!
Salmos 31:1-8 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
En ti, oh Jehová, he confiado; no sea yo confundido jamás; Líbrame en tu justicia. Inclina a mí tu oído, líbrame pronto; Sé tú mi roca fuerte, y fortaleza para salvarme. Porque tú eres mi roca y mi castillo; Por tu nombre me guiarás y me encaminarás. Sácame de la red que han escondido para mí, Pues tú eres mi refugio. En tu mano encomiendo mi espíritu; Tú me has redimido, oh Jehová, Dios de verdad. Aborrezco a los que esperan en vanidades ilusorias; Mas yo en Jehová he esperado. Me gozaré y alegraré en tu misericordia, Porque has visto mi aflicción; Has conocido mi alma en las angustias. No me entregaste en mano del enemigo; Pusiste mis pies en lugar espacioso.
Salmos 31:1-8 La Biblia de las Américas (LBLA)
En ti, oh SEÑOR, me refugio; jamás sea yo avergonzado; líbrame en tu justicia. Inclina a mí tu oído, rescátame pronto; sé para mí roca fuerte, fortaleza para salvarme. Porque tú eres mi roca y mi fortaleza, y por amor de tu nombre me conducirás y me guiarás. Me sacarás de la red que en secreto me han tendido; porque tú eres mi refugio. En tu mano encomiendo mi espíritu; tú me has redimido, oh SEÑOR, Dios de verdad. ¶Aborrezco a los que confían en ídolos vanos; mas yo confío en el SEÑOR. Me gozaré y me alegraré en tu misericordia, porque tú has visto mi aflicción; has conocido las angustias de mi alma, y no me has entregado en manos del enemigo; tú has puesto mis pies en lugar espacioso.
Salmos 31:1-8 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Oh SEÑOR, a ti acudo en busca de protección; no dejes que me avergüencen. Sálvame, porque tú haces lo correcto. Inclina tu oído para escucharme; rescátame pronto. Sé mi roca de protección, una fortaleza donde estaré a salvo. Tú eres mi roca y mi fortaleza; por el honor de tu nombre, sácame de este peligro. Rescátame de la trampa que me tendieron mis enemigos, porque solo en ti encuentro protección. Encomiendo mi espíritu en tu mano; rescátame, SEÑOR, porque tú eres un Dios fiel. Detesto a los que rinden culto a ídolos inútiles; yo confío en el SEÑOR. Me gozaré y me alegraré en tu amor inagotable, porque has visto mis dificultades y te preocupas por la angustia de mi alma. No me entregaste a mis enemigos, sino que me pusiste en un lugar seguro.