Pero tú, Belén Efrata,
aunque eres pequeña entre las familias de Judá,
de ti me saldrá el que ha de ser gobernante en Israel.
Y sus orígenes son desde tiempos antiguos,
desde los días de la eternidad.
Por tanto, Él los abandonará hasta el tiempo
en que dé a luz la que ha de dar a luz.
Entonces el resto de sus hermanos
volverá a los hijos de Israel.
Y Él se afirmará y pastoreará su rebaño
con el poder del SEÑOR,
con la majestad del nombre del SEÑOR su Dios.
Y permanecerán,
porque en aquel tiempo Él será engrandecido
hasta los confines de la tierra.
Y Él será nuestra paz.
C uando el asirio invada nuestra tierra,
y cuando huelle nuestros palacios,
levantaremos contra él
siete pastores y ocho príncipes del pueblo.
Y ellos pastorearán la tierra de Asiria con espada,
la tierra de Nimrod en sus puertas;
Él nos librará del asirio
cuando invada nuestra tierra
y huelle nuestro territorio.
¶Entonces el remanente de Jacob,
en medio de muchos pueblos,
será como rocío que viene del SEÑOR,
como lluvias sobre la hierba
que no espera al hombre
ni aguarda a los hijos de los hombres.
Y será el remanente de Jacob
entre las naciones,
en medio de muchos pueblos,
como león entre las fieras de la selva,
como leoncillo entre los rebaños de ovejas,
que si pasa,
huella y desgarra,
y no hay quien libre.
Se alzará tu mano contra tus adversarios,
y todos tus enemigos serán exterminados.
¶Y sucederá en aquel día —declara el SEÑOR—
que exterminaré tus caballos de en medio de ti,
y destruiré tus carros.
También exterminaré las ciudades de tu tierra,
y derribaré todas tus fortalezas.
Exterminaré las hechicerías de tu mano,
y no tendrás más adivinos.
Exterminaré tus imágenes talladas
y tus pilares sagrados de en medio de ti,
y ya no te postrarás más
ante la obra de tus manos.
Arrancaré tus Aseras de en medio de ti,
y destruiré tus ciudades.
Y con ira y furor tomaré venganza
de las naciones que no obedecieron.