¿Quién lo ha hecho y lo ha realizado,
llamando a las generaciones desde el principio?
Yo, el SEÑOR, soy el primero, y con los postreros soy.
¶Las costas han visto y temen,
tiemblan los confines de la tierra,
se han acercado y han venido.
Cada uno ayuda a su prójimo,
y dice a su hermano: Sé fuerte.
El artífice anima al fundidor,
y el que alisa a martillo al que bate el yunque,
diciendo de la soldadura: Está bien.
Entonces asegura su obra con clavos,
para que no se mueva.
Pero tú, Israel, siervo mío,
Jacob, a quien he escogido,
descendiente de Abraham, mi amigo;
tú, a quien tomé de los confines de la tierra,
y desde sus lugares más remotos te llamé,
y te dije: «Mi siervo eres tú;
yo te he escogido y no te he rechazado»:
No temas, porque yo estoy contigo;
no te desalientes, porque yo soy tu Dios.
Te fortaleceré, ciertamente te ayudaré,
sí, te sostendré con la diestra de mi justicia.
He aquí, todos los que se enojan contra ti serán avergonzados y humillados;
los que contienden contigo serán como nada y perecerán.
Buscarás a los que riñen contigo, pero no los hallarás;
serán como nada, como si no existieran, los que te hacen guerra.
Porque yo soy el SEÑOR tu Dios, que sostiene tu diestra,
que te dice: «No temas, yo te ayudaré».
No temas, gusano de Jacob, vosotros hombres de Israel;
yo te ayudaré —declara el SEÑOR— y tu Redentor es el Santo de Israel.