Nunca he dejado de hacer lo que es justo; no me abandones en manos de mis opresores. Hazte responsable de mi bienestar; que no me maltraten los insolentes. Mis ojos se consumen esperando que me salves, esperando que me libres, conforme a tu promesa. Trata a este siervo tuyo de acuerdo con tu amor; ¡enséñame tus leyes! Yo soy tu siervo. Dame entendimiento, pues quiero conocer tus mandatos. Señor, ya es tiempo de que hagas algo, pues han desobedecido tu enseñanza. Por eso yo amo tus mandamientos mucho más que el oro fino. Por eso me guío por tus preceptos y odio toda conducta falsa.
Leer Salmos 119
Compartir
Comparar todas las versiones: Salmos 119:121-128
¡Guarda versículos, lee sin conexión, mira videos didácticos y más!
Inicio
Biblia
Planes
Videos