»Si un extranjero que vive en tu tierra se hace rico, y en cambio uno de tus compatriotas, vecino del extranjero, se queda en la ruina y se vende a ese extranjero o a algún otro extranjero, tendrá derecho a que se compre su libertad aun después de haberse vendido. Podrá ser rescatado por uno de sus hermanos, un tío, un primo o cualquier pariente cercano; también podrá rescatarse él mismo, si tiene medios para hacerlo, calculando con el que lo compró desde el año en que se vendió hasta el año de liberación: el precio de venta deberá corresponder al número de años, y el tiempo que haya trabajado se calculará según la paga que se da a los trabajadores. Si aún quedan muchos años por delante, en proporción con ellos dará por su rescate parte del dinero que recibió por venderse; pero si falta poco tiempo para el año de liberación, dará por su rescate la cantidad correspondiente a los años que falten. Se le deberá tratar como a un trabajador contratado por año; no permitas que se le trate con crueldad. »Si acaso no es rescatado en este tiempo, quedará en libertad en el año de liberación, junto con sus hijos, pues los israelitas son mis siervos, mis propios siervos; yo los saqué de Egipto. Yo soy el Señor su Dios.
Leer Levítico 25
Compartir
Comparar todas las versiones: Levítico 25:47-55
¡Guarda versículos, lee sin conexión, mira videos didácticos y más!
Inicio
Biblia
Planes
Videos