Durante los siete años de abundancia, en todo Egipto hubo muy buenas cosechas, así que José juntó todo el alimento que se produjo en esos siete años y lo almacenó. En cada ciudad guardó el alimento que produjeron los campos vecinos. José almacenó tanto trigo que parecía haber juntado toda la arena del mar; hasta dejó de anotar la cantidad de trigo guardada, porque ya no era posible llevar la cuenta. Antes de que llegaran los años de escasez, Asenat y José tuvieron dos hijos. Al primero de ellos José lo llamó Manasés porque dijo: «Dios ha hecho que me olvide de todos mis problemas y de la familia de mi padre». A su segundo hijo lo llamó Efraín, porque dijo: «Dios permitió que yo tuviera hijos en este país donde he sufrido tanto». Tal como lo había anunciado José, a los siete años de abundancia siguieron los siete años de escasez. Y aunque había hambre en todos los otros países, en Egipto había de comer. Cuando comenzó a sentirse el hambre en Egipto, los egipcios fueron a pedirle al rey que les diera de comer. Entonces el rey les dijo: «Vayan a ver a José, y hagan lo que él les diga». Cuando ya no había comida en todo el país, José abrió los almacenes y les vendió trigo a los egipcios. Era tanta la escasez de alimentos que de todos los países iban a Egipto para comprarle trigo a José.
Leer Génesis 41
Compartir
Comparar todas las versiones: Génesis 41:47-57
¡Guarda versículos, lee sin conexión, mira videos didácticos y más!
Inicio
Biblia
Planes
Videos