Logo de YouVersion
Ícono Búsqueda

Génesis 2:15-25

Génesis 2:15-25 TLA

Dios puso al hombre en el jardín de Edén para que lo cultivara y lo cuidara, pero claramente le dijo: «Puedes comer de todos los árboles que hay en el jardín, pero no del árbol del conocimiento del bien y del mal. Si comes de ese árbol, te juro que morirás». Luego Dios dijo: «No está bien que el hombre esté solo. Voy a hacerle alguien que lo acompañe y lo ayude». Entonces hizo Dios todos los animales domésticos y salvajes, y todas las aves que vuelan por el cielo, y se los llevó al hombre para que les pusiera nombre. Y este así lo hizo. Sin embargo, para el hombre no se encontró compañía ni ayuda. Por eso Dios hizo que el hombre se quedara profundamente dormido. Y así, mientras este dormía, Dios le sacó una de sus costillas, y luego le cerró el costado. De esa costilla Dios hizo una mujer. Cuando se la llevó al hombre, este dijo: «¡Esta vez tengo a alguien que es carne de mi carne y hueso de mis huesos! La llamaré hembra, porque Dios la sacó del hombre». Esto explica por qué el hombre deja a su padre y a su madre, y se une a su mujer para formar un solo cuerpo. Tanto el hombre como su mujer andaban desnudos, pero no sentían vergüenza de andar así.