Entonces Salomón dijo: «Dios mío, tú siempre has vivido en la espesa nube que acompaña al santuario. Pero ahora, te he construido una casa, para que vivas allí para siempre». Luego el rey se dio vuelta y miró a todo el pueblo de Israel, que se había reunido y estaba de pie. Entonces los bendijo. Y exclamó: «Bendito sea el Dios de Israel, que ha cumplido lo que le prometió a mi padre, pues le dijo: “Desde que saqué de Egipto a mi pueblo, no he elegido ninguna ciudad de las tribus de Israel para que se construya en ella mi templo. Tampoco elegí a ningún hombre para que fuera el gobernante de Israel, mi pueblo. Sin embargo, ahora he elegido a Jerusalén como mi lugar de residencia, y te elegí a ti, David, para que gobiernes a mi pueblo Israel”. »Mi padre deseaba construir un templo para adorar a nuestro Dios. Sin embargo, Dios le dijo: “Haces bien en querer construirme una casa. Pero no serás tú quien la construya, sino uno de tus hijos”. »Dios cumplió su promesa. Ahora yo soy el rey de Israel, en lugar de mi padre, y he construido una casa para nuestro Dios. Además, he preparado un lugar para colocar allí el cofre del pacto que Dios hizo con nosotros».
Leer 2 Crónicas 6
Compartir
Comparar todas las versiones: 2 Crónicas 6:1-11
¡Guarda versículos, lee sin conexión, mira videos didácticos y más!
Inicio
Biblia
Planes
Videos