La tierra tembló y se estremeció; las montañas se cimbraron hasta sus cimientos; ¡se sacudieron por la indignación del Señor! Humo salía de su nariz, y por su boca brotaba fuego encendido; ¡su furor inflamaba los carbones! El Señor inclinó el cielo, y descendió; bajo sus pies había una densa oscuridad. Montó sobre un querubín, y voló; ¡voló sobre las alas del viento! Se envolvió en un manto de sombras; se ocultó entre grises nubes, cargadas de agua. De su deslumbrante presencia salieron ascuas y granizos que cruzaron las nubes. El Señor lanzó un poderoso trueno; el Altísimo dejó escuchar su voz en medio de ascuas y granizos. Lanzó sus flechas, y los dispersó; ¡lanzó relámpagos, y acabó con ellos! El Señor dejó oír su reprensión, ¡y a la vista quedó el fondo de las aguas! De su nariz salió un intenso soplo, ¡y a la vista quedaron los cimientos del mundo!
Leer Salmos 18
Compartir
Comparar todas las versiones: Salmos 18:7-15
¡Guarda versículos, lee sin conexión, mira videos didácticos y más!
Inicio
Biblia
Planes
Videos