Te alabo porque tus obras son formidables, porque todo lo que haces es maravilloso. ¡De esto estoy plenamente convencido! Aunque en lo íntimo me diste forma, y en lo más secreto me fui desarrollando, nada de mi cuerpo te fue desconocido. Con tus propios ojos viste mi embrión; todos los días de mi vida ya estaban en tu libro; antes de que me formaras, los anotaste, y no faltó uno solo de ellos. Dios mío, ¡cuán preciosos me son tus pensamientos! ¡Cuán vastos son en su totalidad! Si los contara, serían más que la arena; si terminara de contarlos, tú aún estarías allí.
Leer Salmos 139
Compartir
Comparar todas las versiones: Salmos 139:14-18
¡Guarda versículos, lee sin conexión, mira videos didácticos y más!
Inicio
Biblia
Planes
Videos