El que habita al abrigo del Altísimo descansará a la sombra del Todopoderoso. Yo digo al SEÑOR: «Tú eres mi refugio, mi fortaleza, el Dios en quien confío». Solo él puede librarte de las trampas del cazador y de mortíferas plagas, pues te cubrirá con sus plumas y bajo sus alas hallarás refugio. Su verdad será tu escudo y tu baluarte. No temerás el terror de la noche ni la flecha que vuela de día ni la plaga que acecha en las sombras ni la peste que destruye a mediodía. Podrán caer a tu lado mil y diez mil a tu derecha, pero a ti no te afectará. No tendrás más que abrir bien los ojos para ver a los impíos recibir su merecido. Ya que has puesto al SEÑOR por tu refugio, al Altísimo por tu protección, ningún mal habrá de sobrevenirte, ningún desastre llegará a tu hogar. Porque él ordenará que sus ángeles te protejan en todos tus caminos. Con sus propias manos te sostendrán para que no tropieces con piedra alguna.
Leer Salmo 91
Escuchar Salmo 91
Compartir
Comparar todas las versiones: Salmo 91:1-12
¡Guarda versículos, lee sin conexión, mira videos didácticos y más!
Inicio
Biblia
Planes
Videos