Tú haces que los manantiales viertan agua en los barrancos, para que los arroyos broten con fuerza y desciendan desde las montañas. Proveen agua a todos los animales, y los burros salvajes sacian su sed. Las aves hacen sus nidos junto a los arroyos y cantan entre las ramas de los árboles. Desde tu hogar celestial, envías lluvia sobre las montañas y colmas la tierra con el fruto de tus obras. Haces crecer el pasto para los animales y las plantas para el uso de la gente. Les permites producir alimento con el fruto de la tierra: vino para que se alegren, aceite de oliva para aliviarles la piel, y pan para que se fortalezcan. Los árboles del SEÑOR están bien cuidados, los cedros del Líbano que plantó. Allí hacen sus nidos las aves, y en los cipreses las cigüeñas hacen su hogar. En lo alto de las montañas viven las cabras salvajes, y las rocas forman un refugio para los damanes. Creaste la luna para que marcara las estaciones, y el sol sabe cuándo ponerse. Envías la oscuridad, y se hace de noche, la hora en que merodean los animales del bosque. Los leones jóvenes rugen por su presa; acechan en busca del alimento que Dios les provee. Al amanecer, se escabullen y se meten en sus guaridas para descansar. Entonces la gente sale a trabajar y realiza sus labores hasta el anochecer. Oh SEÑOR, ¡cuánta variedad de cosas has creado! Las hiciste todas con tu sabiduría; la tierra está repleta de tus criaturas.
Leer Salmos 104
Escuchar Salmos 104
Compartir
Comparar todas las versiones: Salmos 104:10-24
¡Guarda versículos, lee sin conexión, mira videos didácticos y más!
Inicio
Biblia
Planes
Videos