¿Quién es Jesús?Muestra

Jesús Es el Señor Resucitado

¿Alguna vez has estado en un funeral? Sé que es una pregunta morbosa y discúlpame por hacerla de primera instancia. Pero los funerales traen todo tipo de grandes preguntas sobre la muerte, y hasta de la vida después de la muerte.

¿Es la muerte un punto final (o un alto completo) que termina nuestra oración en el mundo? O es la muerte similar a una coma que sirve para pasarnos a otro tipo de existencia? 

¿Hay alguna razón para creer en la vida después de la muerte, y en esperanza más allá del sepulcro?

La escena de la historia que acabamos de leer sucede en una habitación superior poco después que los romanos mataron a Jesús. Los discípulos se reunieron, asustados por este giro devastador de acontecimientos, cuando, de repente, Jesús aparece en medio de ellos. 

Ahora, ésta no era la primera vez que Jesús sorprendía a Sus discípulos al presentarse vivo ante ellos. Tomás, sin embargo, no había estado en esas otras ocasiones por lo que se mantenía incrédulo en cuanto a toda la historia, así que Jesús se le acercó individualmente y le dijo, 

“Pon tu dedo aquí y mira mis manos. Acerca tu mano y métela en mi costado. Y no seas incrédulo, sino hombre de fe.” Tomás le contestó, ”Señor mío y Dios mío“ (v. 27, 28).

De ahí la frase "incrédulo como Tomás".

Ahora, como Tomás, nosotros podríamos tener momentos de duda; tiempos en los que nos preguntamos si Dios es o no real; ocasiones donde dudamos si Jesús realmente nos ama. Nos encontramos preguntándonos, “¿Es todo esto real?” “¿Puedo confiar en lo que no puedo ver?" 

Agraciadamente, no podemos asustar a Dios con nuestras dudas, y cuando se las mencionamos a Dios, eso es actualmente un acto de fe. De hecho, aprendemos en esta historia que Jesús está dispuesto a acercarse a nosotros en medio de nuestras preguntas, y a menudo encontramos una fe mayor y más fuerte como resultado de la lucha con nuestras dudas. 

Pero, poniendo nuestras dudas a un lado, la buena noticia es que tenemos muchas razones sólidas para creer que Dios levantó a Jesús de los muertos. Aquí hay algunas de ellas: 

• La tumba de Jesús fue encontrada vacía el domingo después de ser crucificado y pronunciado muerto. 
• Jesús apareció a Sus discípulos por un período de cuarenta días, incluyendo a los incrédulos como Tomás y a los excépticos como Santiago y Pablo, quienes no eran originalmente seguidores de Jesús.
• Como resiltado de éstas apariciones, la vida de los discípulos fue radicalmente transformada, al punto que muchos de ellos estaban dispuestos a sufrir y morir por creer en Jesús. Obviamente, las personas mueren por causas (o religiones) que ellos creen ciertas, ¡pero no hay personas cuerdas que mueran por algo que saben que es falso! Como nos recuerda esta historia, los primeros discípulos estaban en la posición de conocer si las historias sobre Jesús eran ciertas.

¡La mejor manera de explicar el crecimiento del cristianismo y la transformación contínua de muchas vidas hasta el presente, como también toda la información mencionada arriba, es la resurrección de Jesucristo! 

Este devocional de lectura bíblica de cinco días se enfoca en la identidad de Jesús. La resurrección física de Jesús nos da la clave final. 

El mismo Dios ha confirmado la identidad de Jesús a través de un milagro. 

¡Jesús es realmente el Hijo de Dios y nuestro Salvador! 

La resurrección muestra que la muerte no tiene la última palabra.

Hay esperanza mas allá del sepulcro. 

La muerte no es un punto; es una coma que nos dirige hacia la prescencia de Dios. 

Estamos invitados a responder a Jesús haciendo eco de las palabras de Tomás: “¡Señor mío y Dios mío!”