Nuestro Pan Diario Edición Día 15Muestra
La máquina del dolor
El Dr. Paul Brand, que sirvió como misionero médico en la India, habló sobre los leprosos que tenían terribles deformidades porque sus terminaciones nerviosas no podían sentir dolor. No les dolía cuando pisaban un fuego o se cortaban el dedo con un cuchillo, por lo que dejaban sus heridas desatendidas. Esto provocaba infecciones y deformidades.
El Dr. Brand construyó una máquina que emitía un pitido cuando entraba en contacto con fuego u objetos punzantes. Señalaba las advertencias de lesión en ausencia de dolor. Pronto se ataron máquinas a los dedos y pies de los pacientes. Eso funcionó bien hasta que quisieron jugar al baloncesto. Se quitaron las máquinas, y a menudo se lesionaron de nuevo sin saberlo.
Como el dolor físico a nuestros cuerpos, nuestra conciencia nos alerta del daño espiritual. Pero el pecado habitual e impenitente puede adormecer la conciencia (1 Tim. 4:1-3). Para mantener la conciencia limpia, necesitamos responder al dolor de la culpabilidad apropiada por medio de la confesión (1 Juan 1:9), el arrepentimiento (Hechos 26:20), y la restitución a otros (Lucas 19:8). Pablo podría decir con confianza, "Yo siempre me esfuerzo por tener una conciencia sin ofensa hacia Dios y hacia los hombres" (Hechos 24:16). Como él, no debemos insensibilizarnos al doloroso recordatorio de Dios del pecado, sino permitir que produzca en nosotros un carácter piadoso. -Dennis Fisher
Mi conciencia debe estar bien informada
De la Palabra sagrada de Dios,
Porque la conciencia puede estar muy deformada
Cuando los estándares puros son rechazados. -Fraser
Una conciencia tranquila es una almohada suave.
El Dr. Paul Brand, que sirvió como misionero médico en la India, habló sobre los leprosos que tenían terribles deformidades porque sus terminaciones nerviosas no podían sentir dolor. No les dolía cuando pisaban un fuego o se cortaban el dedo con un cuchillo, por lo que dejaban sus heridas desatendidas. Esto provocaba infecciones y deformidades.
El Dr. Brand construyó una máquina que emitía un pitido cuando entraba en contacto con fuego u objetos punzantes. Señalaba las advertencias de lesión en ausencia de dolor. Pronto se ataron máquinas a los dedos y pies de los pacientes. Eso funcionó bien hasta que quisieron jugar al baloncesto. Se quitaron las máquinas, y a menudo se lesionaron de nuevo sin saberlo.
Como el dolor físico a nuestros cuerpos, nuestra conciencia nos alerta del daño espiritual. Pero el pecado habitual e impenitente puede adormecer la conciencia (1 Tim. 4:1-3). Para mantener la conciencia limpia, necesitamos responder al dolor de la culpabilidad apropiada por medio de la confesión (1 Juan 1:9), el arrepentimiento (Hechos 26:20), y la restitución a otros (Lucas 19:8). Pablo podría decir con confianza, "Yo siempre me esfuerzo por tener una conciencia sin ofensa hacia Dios y hacia los hombres" (Hechos 24:16). Como él, no debemos insensibilizarnos al doloroso recordatorio de Dios del pecado, sino permitir que produzca en nosotros un carácter piadoso. -Dennis Fisher
Mi conciencia debe estar bien informada
De la Palabra sagrada de Dios,
Porque la conciencia puede estar muy deformada
Cuando los estándares puros son rechazados. -Fraser
Una conciencia tranquila es una almohada suave.
Escritura
Acerca de este Plan
Queremos animarte para tener una relación bien pensada, diaria y de corazón a corazón con Dios. Millones de lectores en el mundo han venido al devocional diario Nuestro Pan Diario por momentos de tranquila reflexión. Sólo en unos pocos minutos al día, la inspiración, historias que cambian vidas te dirigen hacia tu Padre celestial y la sabiduría y promesas de Su palabra que no cambia.
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Nos gustaría agradecer a Nuestro Pan Diario por proveer este plan. Para más información, por favor visite: www.odb.org/app