Escogida - Descubriendo La Mujer En CristoMuestra
ESCOGIDA PARA SU GLORIA
"Dios nos escogió en él antes de la creación del mundo, para que vivamos en santidad y sin mancha delante de él. En amor...". Efesios 1:4 (NVI)
Dios no desecha tu pasado, ¡lo transforma!
Rut estaba cansada.
Nacida en un linaje atormentado por maldiciones y adoradora de un dios que nunca perdonaba, Rut sintió que el peso de sus circunstancias caía sobre ella. Cuando la vida se ensañó con su familia tras la pérdida de su marido, decidió seguir a su suegra, Noemí, de quien había oído hablar de un Dios que perdonaba.
La historia de Rut, como la de muchas mujeres de la Biblia, manifiesta la redención que se encuentra en la revelación de Jesús. Sus historias fueron significativas, no a causa de su piedad, sino porque manifestaban la transformación que Jesús trajo a través de la salvación.
También Rajab, cansada de su situación, se volvió al Dios de los israelitas, abandonando la aparente seguridad de su ciudad amurallada. Al igual que estas mujeres, independientemente de nuestros comienzos, volvernos a Dios transforma nuestras historias. Él no desecha nuestro pasado como si fuera basura, sino que lo transforma en algo hermoso.
Un estigma que las mujeres sufren de manera colectiva, proviene de la caída del hombre en el Jardín del Edén.
Como resultado del engaño que sufrió Eva, la mujer ha sido percibida como la más crédula. Sin embargo, la gracia de Dios se puso en marcha antes de la creación. Génesis 3:15, nos da una de las promesas de salvación: Que la semilla de la mujer herirá al enemigo en la cabeza.
Esta fue la declaración del nacimiento de Jesús. Dios había elegido redimirnos y restaurarnos, demostrando su confianza en nosotras mediante la encarnación de Jesús en María.
Si pudo confiar a la mujer la palabra encarnada, ¡cuánto más la palabra escrita!
Querida mujer, ¡comprende que has sido escogida para su gloria! ¡Abraza tu identidad en Él mientras vives tu día a día!
Escritura
Acerca de este Plan
Como mujeres frecuentemente nos encontramos compaginando diferentes papeles en nuestras vidas. Pero en medio de todas nuestras ocupaciones, es importante recordar quiénes somos en lo más profundo: Mujeres Escogidas De Dios o Mujeres En Cristo. Esta es la identidad de la base de nuestra vida, que forma nuestra relación con Dios y los demás. ¡Acompáñanos estos próximos tres días a explorar esta identidad con más profundidad!
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