Un Día a La VezMuestra
El amor a Dios
Si no amamos a Dios, no podemos dar amor a los demás. ¡Este es otro principio bellísimo! Se trata de entender que nuestra labor más hermosa es amar a Dios con todo nuestro corazón y con todas nuestras fuerzas.
A mí no me gusta mucho escuchar cuando otra persona dice que está enamorada de Jesús. Esto se debe a que, al decir «enamorada», mi mente de inmediato lo relaciona con el amor a mi esposo. Aun así, se escucha con mucha frecuencia en canciones interpretadas por hombres y mujeres.
Lo que rescato de esto es que amar a Dios me hace más sensible a las cosas espirituales. Amar a Dios me hace más misericordiosa para entender el dolor de un amigo. Amar a Dios me hace valorar todo lo que Él ha hecho por mí desde perdonar mis pecados, restaurar mi vida y darme una nueva oportunidad de ser feliz.
Te puedo dar fe y testimonio de que amar a Dios, servirle a Él y renunciar a otros intereses me han dado más felicidad que cuando no le conocía. Cuando decidí trabajar en un medio cristiano de comunicación, muchos me tacharon de religiosa, fanática y hasta loca al dejar la fama y el dinero que representaba trabajar en una radio tan importante como lo es Radio Caracol en Miami y dedicarme por completo a servir a Dios.
Hoy, diez años más tarde, he dado el mejor de los frutos. Dios ha recompensado cada minuto de mi trabajo, me ha respaldado, me ha usado para servir de ejemplo e inspiración para otros. Lo que es más lindo, me ha permitido trabajar en lo que me gusta y con el mejor jefe... Él.
Escritura
Acerca de este Plan
Un día a la vez, nos habla de la esperanza que encontramos en Dios y nos muestra su voluntad. Nos conduce por el camino del perdón hacia nuestra libertad, nuestro futuro y nuestra victoria por medio del Señor Jesucristo.
More
Nos gustaría agradecer a Editorial Unilit por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://www.editorialunilit.com/