Jesús: Milagros Sin LímitesMuestra

¡FE SIN LÍMITES!

Un padre y su hijo daban un pequeño paseo en una tarde soleada por algunos lugares de la ciudad. El niño de tan solo cinco años de edad tomado de la mano de su padre sonreía de alegría por compartir tiempo con él. Entre risas y conversaciones, el niño exclamó y le dice a su padre: - ¡Papá, papá, mirá lo que hay en esa tienda! Su padre se queda fijo mirando el escaparate y observa un precioso juguete muy llamativo; era un dinosaurio de color verde que resaltaba por su tamaño y color. El pequeño le dice: - ¡Papá, papá! ¿Recuerdas que hace algunos días mientras veíamos la tele me prometiste que lo comprarías? El padre lo observó y sonrió de ver como su pequeño creyó en su palabra sin dudar en ningún momento de lo que le había prometido.

Así mismo ocurre en nuestra relación con nuestro Padre Celestial. Nosotros como hijos suyos, podemos dirigirnos hacia Él confiadamente para llevar todas nuestras peticiones y anhelos más profundos. Así como el niño confió plenamente en la palabra de su padre que aquello que le prometió lo había de cumplir. Dios espera de nosotros que podamos creer en Él, en Su Palabra y que Sus promesas se cumplirán. A esto se le llama FE.

En el versículo de Mateo 17:20, encontramos a Jesús diciendo; ̈si tuvieran fe tan pequeña como un grano de mostaza ̈, es decir, que si tan solo confiar, creer, pensar en que es posible: ̈para ustedes nada sería imposible ̈.

Si lo opuesto de la fe es la incredulidad y desconfianza, logramos entender que sin fe es imposible agradar a Dios. Ver su poder restaurador, sanador, libertador en nuestra vida. Una fe sin limites es creer, confiar y tener la convicción de que en Jesús todo es posible. Una fe sin límites no razona, escucha la palabra de su Padre y cree, obedece, aunque mi circunstancia diga lo contrario; es ver más allá para experimentar lo sobrenatural del poder de Dios.

Tal vez hoy puedas identificarte con la situación en la que los discípulos se encontraban en este texto de la biblia. Quizás te estás preguntando a ti mismo(a) o le estás preguntando a Dios, porqué hay alguna situación en tu vida que aún no se resuelve, o porqué no logras ver aquellas promesas que Dios ha hecho en tu vida, o aquel milagro que tanto has esperado por meses y hasta años.

Hoy quiero desafiarte a que puedas ir delante de tu padre confiadamente como aquel niño que cree en la palabra de su padre, convencido de que recibirá lo que su padre prometió. Que puedas elevar tu fe por encima de lo que tus ojos ven. Anímate a ir a un nuevo nivel de fe que no se limita.

Que puedas experimentar el poder de Dios de forma tangible en tu vida y disfrutar de la paternidad de hijo(a) creyendo, confiando, convencido, anhelando y dando gracias por adelantado por todas las promesas que Dios te ha dado, así como Jesús les dijo a sus discípulos: Les aseguro que, si tuvieran fe tan pequeña como un grano de mostaza...para ustedes nada seria imposible. Mateo 17:20 (NVI).