Grupos pequeños, gran crecimientoMuestra

Cómo comenzó todo

Probablemente has conocido a personas que siguen a Cristo que encontraron un gran avance, o encontraron sanidad por causa de un grupo pequeño del cual forman parte. Puede que incluso seas una de esas personas o que dirijas uno de esos grupos. Pero, ¿qué pasaría si te dijeramos que cada cristiano le debe su fe a un pequeño grupo de gente común? Algunos tenían familias. Algunos eran trabajadores de cuello blanco, otros de cuello azul. Sin embargo, todos ellos comprometieron todo para promover la fe juntos, y los resultados son inmensurables.

Sí, lo estás pillando. Jesús y Sus discípulos fueron el primer Grupo de Vida. Se rieron juntos, viajaron a todas partes juntos, aprendieron juntos, sirvieron juntos, oraron juntos, y en una forma muy real y no cliché, cambiaron al mundo juntos.

¿Suena eso como tu grupo pequeño? Cuando oras, ¿la gente encuentra sanidad y avance? Cuando vives tu semana, ¿te encuentras constantemente a ti y a tu grupo atrayendo gente hacia la fe? Cuando se reúnen, ¿se sienten como un grupo de apoyo tratando de recuperar el aliento de todas las increíbles y agotadoras experiencias de compartir el amor y el poder de Cristo a lo largo de la semana?

Cuando Jesús miró a Sus discípulos, no vio un equipo de ensueño muy espiritual o un equipo suburbano super cómodo. Él vio una pequeña parte del mundo. A pesar de, o quizás por causa de, Su estatus ordinario, Él tenía planes de recuperar el mundo entero a través de ellos. Cuando ves a tu grupo, ¿qué es lo que ves? ¿Cómo refleja esto tu visión para tu grupo? ¿Cuál es la visión de Dios para tu grupo?

Ora: Dios, ¿estoy dejando algo de lado como líder de un Grupo de Vida? ¿Tienes algo más grande para mi grupo? Hoy, invito al Espíritu Santo a abrir mi corazón y mis ojos a lo que Tú quieres hacer en y a través de nuestro grupo. Amén.