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La Palabra (versión española)

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 <div class="chapter ch1" data-usfm="1CO.1.25">
 <div class="p">25pues lo que en Dios parece absurdo es mucho m&#225;s sabio que lo humano, y lo que en Dios parece d&#233;bil es m&#225;s fuerte que lo humano.#2 Co 13,4. </div>
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 <div class="chapter ch1" data-usfm="1CO.1">
 <div class="label">1</div><div class="ms2">Introducci&#243;n (1,1-9)</div><div class="s1">Saludo</div><div class="p"> 1Pablo, elegido por designio de Dios para ser ap&#243;stol de Cristo Jes&#250;s, y el hermano S&#243;stenes,#Rm 1,1; 2 Co 1,1; Ga 1,1. 2a la Iglesia de Dios reunida en Corinto. A vosotros que, consagrados por Cristo Jes&#250;s, hab&#233;is sido elegidos por Dios para ser su pueblo, junto con todos los que en cualquier lugar invocan el nombre de Jesucristo, Se&#241;or suyo y nuestro.#6,11; Hch 9,14; Rm 10,13. 3Que Dios, nuestro Padre, y Jesucristo, el Se&#241;or, os concedan gracia y paz.#Rm 1,7.</div><div class="s1">Acci&#243;n de gracias</div><div class="p"> 4Doy gracias sin cesar a mi Dios por vosotros ya que os ha otorgado su gracia mediante Jesucristo 5y os ha enriquecido sobremanera con toda clase de dones, tanto en lo que se refiere al conocer como al hablar. 6Y de tal manera se ha consolidado en vosotros el mensaje de Cristo, 7que de ning&#250;n don carec&#233;is mientras est&#225;is a la espera de que nuestro Se&#241;or Jesucristo se manifieste.#Lc 17,30; 1 Ts 1,10; 2 Ts 1,7; Tt 2,13. 8&#201;l ser&#225; quien os mantenga firmes hasta el fin, para que nadie tenga de qu&#233; acusaros el d&#237;a de nuestro Se&#241;or Jesucristo. 9Dios, que os ha elegido para vivir en uni&#243;n con su Hijo Jesucristo, es un Dios que cumple su palabra.#10,13; Dt 7,9; 1 Ts 5,24.</div><div class="ms1">I. Divisiones dentro de la comunidad (1,10&#8211;4,21)</div><div class="s1">Diversos grupos en la iglesia de Corinto</div><div class="p"> 10Pero tengo algo que pediros, hermanos, y lo hago en nombre de nuestro Se&#241;or Jesucristo: que haya concordia entre vosotros. Desterrad cuanto signifique divisi&#243;n y recuperad la armon&#237;a pensando y sintiendo lo mismo.#Rm 15,5; Flp 2,2. 11Digo esto, hermanos m&#237;os, porque los de Cloe me han informado de que hay divisiones entre vosotros. 12Me refiero a eso que anda diciendo cada uno de vosotros: &#171;Yo pertenezco a Pablo&#187;, &#171;yo a Apolo&#187;, &#171;yo a Pedro&#187;, &#171;yo a Cristo&#187;. 13Pero bueno, &#191;es que Cristo est&#225; dividido? &#191;Ha sido crucificado Pablo por vosotros o hab&#233;is sido bautizados en su nombre? 14&#161;Es como para dar gracias a Dios el no haber bautizado entre vosotros m&#225;s que a Crispo y a Gayo!#Hch 1,18; 19,29; Rm 16,23. 15As&#237; nadie puede presumir de haber quedado vinculado a m&#237; por el bautismo. 16Bueno, tambi&#233;n bautic&#233; a la familia de Est&#233;fanas; fuera de estos, no recuerdo haber bautizado a ning&#250;n otro.#16,15.17. 17Es que Cristo no me envi&#243; a bautizar, sino a proclamar el evangelio. Y a proclamarlo sin alardes de humana elocuencia, para que no quede anulada la eficacia de la cruz de Cristo.#2,1-5; Mt 28,19.</div><div class="s1">Cristo crucificado, poder y sabidur&#237;a de Dios</div><div class="p"> 18El lenguaje de la cruz es, ciertamente, un absurdo para los que van por sendas de perdici&#243;n; mas para nosotros, los que estamos en camino de salvaci&#243;n, es poder de Dios.#Rm 1,16. 19Lo dice la Escritura: Destruir&#233; la sabidur&#237;a de los sabios y har&#233; fracasar la inteligencia de los inteligentes.#Is 29,14.</div><div class="p"> 20&#191;Qui&#233;n se atrever&#225; a presumir de sabio, de maestro o de investigador de este mundo? &#191;No ha demostrado Dios que la sabidur&#237;a de este mundo es pura necedad?#Is 44,25. 21En efecto, el mundo con su sabidur&#237;a sobre Dios no ha llegado a conocer a Dios a trav&#233;s de esa sabidur&#237;a. Por eso, Dios ha decidido salvar a los creyentes a trav&#233;s de un mensaje que parece absurdo.#Rm 1,19-21. 22Porque mientras los jud&#237;os piden milagros y los griegos buscan sabidur&#237;a,#Mt 12,38-39; Hch 17,18-20. 23nosotros anunciamos a Cristo crucificado, que para los jud&#237;os es una piedra en que tropiezan y para los paganos es cosa de locos. 24Pero para los que Dios ha elegido, sean jud&#237;os o griegos, ese Cristo es poder y sabidur&#237;a de Dios,#Col 2,3. 25pues lo que en Dios parece absurdo es mucho m&#225;s sabio que lo humano, y lo que en Dios parece d&#233;bil es m&#225;s fuerte que lo humano.#2 Co 13,4. 26Basta, hermanos, con que os fij&#233;is en c&#243;mo se ha realizado vuestra elecci&#243;n: no abundan entre vosotros los que el mundo considera sabios, poderosos o arist&#243;cratas.#Mt 11,25. 27Al contrario, Dios ha escogido lo que el mundo tiene por necio, para poner en rid&#237;culo a los que se creen sabios; ha escogido lo que el mundo tiene por d&#233;bil, para poner en rid&#237;culo a los que se creen fuertes; 28ha escogido lo sin importancia seg&#250;n el mundo, lo despreciable, lo que nada cuenta, para anular a quienes piensan que son algo. 29De este modo, ning&#250;n mortal podr&#225; alardear de algo ante Dios#Rm 3,27; Ef 2,9. 30que os ha injertado en Cristo Jes&#250;s, convertido para nosotros en sabidur&#237;a divina, en poder salvador, santificador y liberador. 31As&#237; que, como dice la Escritura, si de algo hay que presumir, que sea de lo que ha hecho el Se&#241;or.#Jr 9,22-23 (cita libre); 2 Co 10,17.</div>
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 <div class="chapter ch2" data-usfm="1CO.2">
 <div class="label">2</div><div class="s1">Pablo y su proclamaci&#243;n del mensaje en Corinto</div><div class="p"> 1Yo mismo, hermanos, cuando llegu&#233; a vuestra ciudad, no os anunci&#233; el proyecto salvador de Dios con alardes de sabidur&#237;a o elocuencia. 2Decid&#237; que entre vosotros deb&#237;a ignorarlo todo, a excepci&#243;n de Cristo crucificado;#2 Co 11,6; Ga 6,14. 3as&#237; que me present&#233; ante vosotros sin recursos y temblando de miedo.#Hch 18,9; 2 Co 10,1. 4Mi predicaci&#243;n y mi mensaje no se apoyaban en una elocuencia inteligente y persuasiva; era el Esp&#237;ritu con su poder quien os convenc&#237;a,#1 Ts 1,5. 5de modo que vuestra fe no es fruto de la sabidur&#237;a humana, sino del poder de Dios.</div><div class="s1">La verdadera sabidur&#237;a</div><div class="p"> 6Sin embargo, tambi&#233;n nosotros disponemos de una sabidur&#237;a para los formados en la fe; una sabidur&#237;a que no pertenece a este mundo ni a los poderes perecederos que gobiernan este mundo;#3,1; Ef 4,13. 7una sabidur&#237;a divina, misteriosa, escondida, destinada por Dios, desde antes de todos los tiempos, a constituir nuestra gloria.#Rm 16,25-27; Col 1,26. 8Ninguno entre los poderosos de este mundo ha llegado a conocer tal sabidur&#237;a, pues, de haberla conocido, no habr&#237;an crucificado al Se&#241;or de la gloria. 9Pero seg&#250;n dice la Escritura: Lo que jam&#225;s vio ojo alguno, lo que ning&#250;n o&#237;do oy&#243;, lo que nadie pudo imaginar que Dios ten&#237;a preparado para aquellos que lo aman,#Is 64,3. 10eso es lo que Dios nos ha revelado por medio del Esp&#237;ritu. Pues el Esp&#237;ritu todo lo sondea, incluso lo m&#225;s profundo de Dios. 11&#191;Qui&#233;n, en efecto, conoce lo &#237;ntimo del ser humano, sino el mismo esp&#237;ritu humano que habita en su interior? Lo mismo pasa con las cosas de Dios: solo el Esp&#237;ritu divino las conoce.#Pr 20,27. 12En cuanto a nosotros, no hemos recibido el esp&#237;ritu del mundo, sino el Esp&#237;ritu que procede de Dios, para poder as&#237; reconocer los dones que Dios nos ha otorgado.#Jn 16,13-14.</div><div class="p"> 13Esto es precisamente lo que expresamos con palabras que no est&#225;n inspiradas por el saber humano, sino por el Esp&#237;ritu. Y as&#237; acomodamos las cosas espirituales a los que poseen el Esp&#237;ritu.</div><div class="p"> 14La persona mundana es incapaz de captar lo que procede del Esp&#237;ritu de Dios; lo considera un absurdo y no alcanza a comprenderlo, porque solo a la luz del Esp&#237;ritu pueden ser valoradas estas cosas.#Jn 14,17. 15En cambio, la persona animada por el Esp&#237;ritu puede emitir juicio sobre todo, sin que ella est&#233; sujeta al juicio de nadie.#1 Jn 2,20. 16Porque &#191;qui&#233;n conoce el modo de pensar del Se&#241;or hasta el punto de poder darle lecciones? &#161;Ahora bien, nosotros estamos en posesi&#243;n del modo de pensar de Cristo!#Is 40,13; Rm 11,34.</div>
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 <div class="book bk2SA">
 <div class="chapter ch19" data-usfm="2SA.19">
 <div class="label">19</div><div class="p"> 1El rey se conmovi&#243;, subi&#243; a la habitaci&#243;n que hab&#237;a encima de la puerta y se puso a llorar diciendo mientras sub&#237;a:</div><div class="p">&#8212;&#161;Hijo m&#237;o, Absal&#243;n, hijo m&#237;o! &#161;Hijo m&#237;o, Absal&#243;n! &#161;Ojal&#225; hubiera muerto yo en tu lugar! &#161;Absal&#243;n, hijo m&#237;o, hijo m&#237;o! #13,37; 14,33; 18,5.</div><div class="p"> 2Informaron a Joab de que el rey estaba llorando y lament&#225;ndose por Absal&#243;n; 3as&#237; que la victoria de aquel d&#237;a se transform&#243; en luto para toda la tropa, pues la gente oy&#243; decir aquel mismo d&#237;a que el rey estaba muy afectado por su hijo. 4Y la tropa entr&#243; a escondidas aquel d&#237;a en la ciudad, como hacen los que se sienten avergonzados por haber huido del combate.</div><div class="p"> 5Mientras tanto el rey se tapaba el rostro y dec&#237;a a grandes gritos:</div><div class="p">&#8212;&#161;Hijo m&#237;o, Absal&#243;n, Absal&#243;n, hijo m&#237;o, hijo m&#237;o!</div><div class="p"> 6Entonces Joab se present&#243; ante el rey y le dijo:</div><div class="p">&#8212;Hoy has cubierto de verg&#252;enza a tus servidores que acaban de salvaros la vida a ti, a tus hijos e hijas, y a tus mujeres y concubinas; 7resulta que amas a los que te odian y odias a los que te aman. Hoy has demostrado que para ti no cuentan ni jefes ni soldados. Ahora me doy cuenta de que te habr&#237;a gustado m&#225;s que Absal&#243;n estuviera vivo y todos nosotros muertos. 8As&#237; que, dec&#237;dete y sal a animar a los soldados; pues te juro por Dios que si no sales ahora, no quedar&#225; nadie contigo esta noche; y esta ser&#225; la peor de todas las desgracias que te hayan sobrevenido desde tu juventud hasta ahora.</div><div class="p"> 9Entonces el rey se levant&#243;, se sent&#243; en la puerta y avisaron a la tropa:</div><div class="p">&#8212;El rey est&#225; sentado en la puerta.</div><div class="p">Y toda la tropa se present&#243; ante el rey.</div><div class="s1">Regreso de David</div><div class="p">Los israelitas hab&#237;an huido a sus tiendas, 10y en todas las tribus de Israel la gente discut&#237;a, diciendo:</div><div class="p">&#8212;El rey nos ha salvado de todos nuestros enemigos y nos ha librado de los filisteos. Pero ha tenido que abandonar el pa&#237;s por culpa de Absal&#243;n. 11Y Absal&#243;n, al que hab&#237;amos ungido como jefe, ha muerto en la batalla. Entonces, &#191;a qu&#233; esper&#225;is para restablecer al rey?</div><div class="p"> 12Cuando los comentarios de Israel llegaron a o&#237;dos del rey, &#233;l mand&#243; a decir a los sacerdotes Sadoc y Abiatar:</div><div class="p">&#8212;Decid a los ancianos de Jud&#225;: &#171;&#191;Por qu&#233; vais a ser los &#250;ltimos en restablecer al rey en su palacio? 13Vosotros sois mis hermanos de sangre, &#191;ser&#233;is los &#250;ltimos en restablecer al rey?&#187;. 14Y a Amas&#225; le dir&#233;is: &#171;T&#250; eres mi pariente. Que Dios me castigue si no te nombro general vitalicio del ej&#233;rcito en sustituci&#243;n de Joab&#187;.#1 Sm 3,17+.</div><div class="p"> 15David se gan&#243; a todos los de Jud&#225; de forma un&#225;nime, y ellos mandaron a decir al rey:</div><div class="p">&#8212;Regresa con toda tu gente.</div><div class="p"> 16El rey emprendi&#243; el regreso y lleg&#243; al Jord&#225;n. Los de Jud&#225; fueron a Guilgal para salir al encuentro del rey y ayudarle a cruzar el Jord&#225;n.</div><div class="p"> 17Sime&#237;, el hijo de Guer&#225;, benjaminita de Bajur&#237;n, se apresur&#243; a bajar con los hombres de Jud&#225; al encuentro del rey David.#16,1-13. 18Iba acompa&#241;ado por mil hombres de Benjam&#237;n. Tambi&#233;n lleg&#243; Sib&#225;, el criado de la familia de Sa&#250;l, con sus quince hijos y veinte siervos. Ambos llegaron al Jord&#225;n antes que el rey 19y cruzaron el vado para ayudar a pasar a la familia del rey y ponerse a su disposici&#243;n. Sime&#237;, el hijo de Guer&#225;, se postr&#243; ante el rey, cuando iba a cruzar el Jord&#225;n, 20y le dijo:</div><div class="p">&#8212;Que mi se&#241;or no tenga en cuenta mi delito, ni recuerde las ofensas de su siervo el d&#237;a en que el rey, mi se&#241;or, sal&#237;a de Jerusal&#233;n. Que el rey no se las tome a pecho. 21Tu siervo reconoce que te ha ofendido. Por eso, hoy he sido el primero de toda la casa de Jos&#233; en venir a recibir al rey, mi se&#241;or.</div><div class="p"> 22Abisay, el hijo de Seruy&#225;, intervino diciendo:</div><div class="p">&#8212;&#191;Y con esto va a seguir vivo Sime&#237;, siendo as&#237; que maldijo al ungido del Se&#241;or?</div><div class="p"> 23David contest&#243;:</div><div class="p">&#8212;&#161;Esto no es asunto vuestro, hijos de Seruy&#225;! &#161;Dejad hoy de ponerme a prueba! Hoy no debe morir nadie en Israel, pues ahora estoy seguro de que soy el rey de Israel.</div><div class="p"> 24Luego dijo a Sime&#237;:</div><div class="p">&#8212;No vas a morir.</div><div class="p">Y el rey se lo jur&#243;.</div><div class="p"> 25Mefib&#243;set, el nieto de Sa&#250;l, baj&#243; tambi&#233;n al encuentro del rey. No se hab&#237;a lavado los pies, ni arreglado la barba, ni lavado sus ropas desde el d&#237;a en que el rey se march&#243; hasta el d&#237;a en que volv&#237;a a salvo.#ver 9,1-13. 26Cuando lleg&#243; de Jerusal&#233;n al encuentro del rey, este le pregunt&#243;:</div><div class="p">&#8212;Mefib&#243;set, &#191;por qu&#233; no viniste conmigo?</div><div class="p"> 27&#201;l respondi&#243;:</div><div class="p">&#8212;Majestad, mi criado me traicion&#243;. Pues yo me dije: &#171;voy a aparejar el burro, para montar en &#233;l y marchar con el rey&#187;, ya que tu servidor est&#225; cojo. 28Por lo tanto, han calumniado a tu servidor ante el rey, mi se&#241;or. Pero su majestad es como un enviado de Dios. Haz, pues, lo que te parezca mejor. 29Y aunque para mi se&#241;or, el rey, toda la familia de mi padre merec&#237;a la muerte, t&#250; invitaste a tu servidor a comer en tu mesa. &#191;Con qu&#233; derecho, pues, voy a exigir nada m&#225;s al rey?</div><div class="p"> 30El rey le dijo:</div><div class="p">&#8212;&#161;D&#233;jate de monsergas! He decidido que t&#250; y Sib&#225; os repart&#225;is las tierras.</div><div class="p"> 31Mefib&#243;set dijo al rey:</div><div class="p">&#8212;Puede incluso quedarse con todo, toda vez que mi se&#241;or, el rey, vuelve a casa sano y salvo.</div><div class="p"> 32Barzilay, el de Galaad, baj&#243; desde Roguel&#237;n para cruzar el Jord&#225;n con el rey y despedirlo desde all&#237;.#17,27-29. 33Barzilay era muy viejo, ten&#237;a ochenta a&#241;os, y hab&#237;a mantenido al rey durante su estancia en Majan&#225;in, pues era un hombre muy rico. 34El rey dijo a Barzilay:</div><div class="p">&#8212;T&#250; seguir&#225;s conmigo, que yo te mantendr&#233; ahora en Jerusal&#233;n.</div><div class="p"> 35Pero Barzilay respondi&#243; al rey:</div><div class="p">&#8212;&#191;Cu&#225;ntos a&#241;os de vida me quedan para irme ahora con el rey a Jerusal&#233;n? 36Ya he cumplido ochenta a&#241;os y ya no s&#233; distinguir lo bueno de lo malo, ni saboreo lo que como y lo que bebo, ni puedo escuchar la voz de cantores y cantoras. Tu servidor solo ser&#237;a ya una carga para mi se&#241;or, el rey. 37Tu servidor solo quiere acompa&#241;ar un poco al rey hasta cruzar el Jord&#225;n, pero no es necesario que el rey me d&#233; esa recompensa. 38D&#233;jame que regrese a morir en mi ciudad, junto a la sepultura de mis padres, y que tu servidor Quime&#225;n siga con mi se&#241;or, el rey, y lo trate como le parezca mejor.</div><div class="p"> 39El rey dijo:</div><div class="p">&#8212;Est&#225; bien. Que venga conmigo Quime&#225;n y yo lo tratar&#233; como mejor te parezca, pues yo har&#233; por ti todo lo que desees.</div><div class="p"> 40Toda la gente cruz&#243; el Jord&#225;n y el rey tambi&#233;n cruz&#243;. Luego el rey abraz&#243; a Barzilay, lo bendijo y &#233;l regres&#243; a su tierra. 41El rey sigui&#243; hasta Guilgal y Quime&#225;n iba con &#233;l. Todo Jud&#225; y la mitad de Israel acompa&#241;aban al rey.</div><div class="p"> 42Entonces todos los israelitas vinieron a decir al rey:</div><div class="p">&#8212;&#191;C&#243;mo es que nuestros hermanos de Jud&#225; te han acaparado, ayudando a cruzar el Jord&#225;n al rey, a su familia y a toda su gente?</div><div class="p"> 43Todos los de Jud&#225; respondieron a los de Israel:</div><div class="p">&#8212;Porque el rey es pariente nuestro. Pero &#191;por qu&#233; os enfad&#225;is as&#237;? &#191;Acaso hemos comido a costa del rey o hemos sacado alg&#250;n provecho?</div><div class="p"> 44Pero los de Israel replicaron a los de Jud&#225;:</div><div class="p">&#8212;Nosotros tenemos diez partes en el rey y m&#225;s derechos que vosotros sobre David. &#191;Por qu&#233; nos hab&#233;is despreciado? &#191;Acaso no sali&#243; de nosotros la iniciativa de restablecer a nuestro rey?</div><div class="p">Entonces los de Jud&#225; respondieron con palabras a&#250;n m&#225;s duras que los de Israel.#1 Re 11,31-32.</div>
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 <div class="chapter ch20" data-usfm="2SA.20">
 <div class="label">20</div><div class="s1">Rebeli&#243;n de Seb&#225;</div><div class="p"> 1Se encontraba en Guilgal un indeseable llamado Seb&#225;, hijo de Bicr&#237;, de la tribu de Benjam&#237;n. Hizo sonar el cuerno y grit&#243;:</div><div class="p">&#8212;&#161;No tenemos nada que ver con David, ni repartimos herencia con el hijo de Jes&#233;! &#161;Israel, a tus tiendas!#1 Re 12,16.</div><div class="p"> 2Todos los israelitas abandonaron a David y siguieron a Seb&#225;. Los jud&#237;os, en cambio, acompa&#241;aron fielmente a su rey desde el Jord&#225;n hasta Jerusal&#233;n.</div><div class="p"> 3Cuando David lleg&#243; a su palacio en Jerusal&#233;n, encerr&#243; en el har&#233;n a las diez concubinas que hab&#237;a dejado al cuidado del palacio. Las sigui&#243; manteniendo, pero no volvi&#243; a acostarse con ellas y estuvieron encerradas hasta el d&#237;a de su muerte, como viudas de por vida.#15,16; 16,21-22.</div><div class="p"> 4Luego el rey dijo a Amas&#225;:</div><div class="p">&#8212;Convoca a la gente de Jud&#225; en el plazo de tres d&#237;as y luego te presentas aqu&#237;.</div><div class="p"> 5Amas&#225; fue a convocar a Jud&#225;, pero tard&#243; m&#225;s tiempo del previsto. 6Entonces David dijo a Abisay:</div><div class="p">&#8212;Ahora Seb&#225;, el hijo de Bicr&#237;, nos puede hacer m&#225;s da&#241;o que Absal&#243;n. Sal con los hombres de tu se&#241;or a perseguirlo, antes de que llegue a las ciudades fortificadas y se nos escape.</div><div class="p"> 7Abisay parti&#243; de Jerusal&#233;n al frente de los hombres de Joab, los quereteos, los peleteos y todos los valientes y salieron en persecuci&#243;n de Seb&#225;, el hijo de Bicr&#237;.#23,8.13.24-29. 8Cuando estaban junto a la piedra grande que hay en Gaba&#243;n, se encontraron con Amas&#225;. Joab llevaba sobre su vestimenta un cintur&#243;n con una espada envainada, atada al muslo. La espada se le sali&#243; y cay&#243;. 9Joab salud&#243; a Amas&#225;:</div><div class="p">&#8212;&#191;Est&#225;s bien, hermano?</div><div class="p">Luego lo agarr&#243; de la barba con su mano derecha para besarlo. 10Pero Amas&#225; no repar&#243; en la espada que Joab llevaba en la otra mano y este se la clav&#243; en la barriga; se le salieron los intestinos a Amas&#225; y as&#237;, de un solo golpe, muri&#243;. Luego Joab y su hermano Abisay reanudaron la persecuci&#243;n de Seb&#225;, el hijo de Bicr&#237;.</div><div class="p"> 11Uno de los soldados de Joab se qued&#243; junto a Amas&#225; y grit&#243;:</div><div class="p">&#8212;&#161;El que est&#233; con Joab y David, que siga a Joab!</div><div class="p"> 12Amas&#225; yac&#237;a en medio del camino, ba&#241;ado en su propia sangre y, cuando el soldado aquel vio que la gente se deten&#237;a, retir&#243; el cad&#225;ver fuera del camino y lo cubri&#243; con un manto, pues hab&#237;a visto que todos los que llegaban junto a &#233;l se deten&#237;an. 13Y cuando Amas&#225; hubo sido retirado del camino, todo el mundo sigui&#243; a Joab en persecuci&#243;n de Seb&#225;, el hijo de Bicr&#237;.</div><div class="p"> 14Seb&#225; recorri&#243; todas las tribus de Israel y lleg&#243; hasta Abel Bet Maac&#225;, donde se congregaron todos los beritas entrando tras &#233;l. 15Llegaron tambi&#233;n los de Joab y sitiaron a Seb&#225; en Abel Bet Maac&#225;; construyeron una rampa de asedio contra la ciudad, la colocaron sobre la muralla y toda la gente de Joab se puso a golpear la muralla para derribarla. 16Entonces una mujer sensata se puso a gritar desde la ciudad:</div><div class="p">&#8212;&#161;Escuchad, escuchad! Decidle a Joab que se acerque aqu&#237;, que quiero hablarle.</div><div class="p"> 17&#201;l se acerc&#243; y la mujer le pregunt&#243;:</div><div class="p">&#8212;&#191;Eres t&#250; Joab?</div><div class="p">&#201;l respondi&#243;:</div><div class="p">&#8212;S&#237;, yo soy.</div><div class="p">La mujer le dijo:</div><div class="p">&#8212;Por favor, escucha las palabras de tu sierva.</div><div class="p">Joab le dijo:</div><div class="p">&#8212;Te escucho.</div><div class="p"> 18Entonces ella dijo:</div><div class="p">&#8212;Antiguamente se sol&#237;a decir: &#171;Que pregunten en Abel, y caso resuelto&#187;. 19Somos israelitas pac&#237;ficos y fieles &#161;y t&#250; pretendes destruir una ciudad importante de Israel! &#191;Por qu&#233; quieres arruinar el patrimonio del Se&#241;or?</div><div class="p"> 20Joab contest&#243;:</div><div class="p">&#8212;&#161;L&#237;breme Dios! &#161;L&#237;breme Dios de arruinar y destruir! 21No es ese el caso. Se trata de un hombre de la monta&#241;a de Efra&#237;n, llamado Seb&#225;, hijo de Bicr&#237;, que se ha rebelado contra el rey David. Entreg&#225;dnoslo a &#233;l solo y abandonar&#233; la ciudad.</div><div class="p">La mujer respondi&#243; a Joab:</div><div class="p">&#8212;Te echaremos su cabeza desde la muralla.</div><div class="p"> 22La mujer convenci&#243; a toda la gente con su sensatez: cortaron la cabeza a Seb&#225;, el hijo de Bicr&#237;, y se la arrojaron a Joab. Luego Joab hizo sonar el cuerno, levantaron el asedio de la ciudad y cada cual march&#243; a su tienda. Joab por su parte regres&#243; a Jerusal&#233;n, junto al rey.</div><div class="s1">Funcionarios de David</div><div class="p"> 23Joab era el jefe de todo el ej&#233;rcito de Israel; Bena&#237;as, hijo de Joyad&#225;, estaba al mando de los quereteos y peleteos; #8,16-18. 24Ador&#225;n era inspector de trabajos forzados; Josafat, hijo de Ajilud, era el heraldo; 25Sera&#237;as era secretario; y Sadoc y Abiatar, sacerdotes. 26Ir&#225;, de Ja&#237;r, tambi&#233;n era sacerdote de David.</div>
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 <div class="book bkPSA">
 <div class="chapter ch114" data-usfm="PSA.114">
 <div class="label">114</div><div class="ms2">Salmo 114</div><div class="s1">Cuando Israel sali&#243; de Egipto</div><div class="q"> 1Cuando Israel sali&#243; de Egipto,</div><div class="q">la casa de Jacob de un pueblo extranjero,#Ex 12,51.</div><div class="q"> 2Jud&#225; se convirti&#243; en su santuario,</div><div class="q">Israel en sus dominios.#78,54; Ex 15,17.</div><div class="q"> 3Lo vio el mar y sali&#243; huyendo,</div><div class="q">el Jord&#225;n retrocedi&#243;.#66,6; Jos 3,15-16; 4,23.</div><div class="q"> 4Como carneros saltaron los montes,</div><div class="q">como corderillos las colinas.#29,6.</div><div class="q"> 5&#191;Qu&#233; tienes t&#250;, mar, que huyes</div><div class="q">y t&#250;, Jord&#225;n, que retrocedes?</div><div class="q"> 6Montes, &#191;por qu&#233; salt&#225;is como carneros</div><div class="q">y vosotras, colinas, como corderillos?</div><div class="q"> 7Tiembla, oh tierra, ante el Se&#241;or,</div><div class="q">delante del Dios de Jacob,#96,9; 99,1; 114,7; Jos 5,4.</div><div class="q"> 8que la roca torna en estanque,</div><div class="q">la pe&#241;a en un manantial.#74,15; 78,16; 105,41; 107,35; Nm 20,11; Dt 8,15.</div>
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