El Dios sin religiónMuestra

Andar como Jesús anduvo en la tierra, ese debe ser nuestro objetivo de cada día. A lo que me refiero, es que estamos llamados a traer un poco del cielo a la tierra con nuestra forma de vivir. Tú y yo podemos ser destellos del cielo para las personas, al amarlos, al acompañarlos, al darles nuestra amistad, al perdonar al que nos hizo daño.

En la vida vamos a conocer gente que no cree en lo mismo que nosotros, otros que no creen en absolutamente nada. Tu función no es juzgarlos y ni siquiera es la de convencerlos a que crean en lo que tú crees. Tu función es amar, así como oíste. Amar es la mayor revolución. Jesús vino y amó aquí en la tierra a gente que no era bien vista por la población y a Él no le importó abrazar y amar a alguien aun cuando esto implicaba críticas a su ministerio.

Sonará quizá raro, pero la mayoría de personas que me rodean no creen en lo que yo creo. Hay uno que no cree en nada. Y los considero mis amigos y los amo como no tienes idea. No son muchos, pero siempre están ahí para mí. Algunas personas me preguntan como es posible que yo me junte con esas personas. Pero hace año que decidí seguir la mejor revolución que nos dejó Jesús, la de amar a todos los que nos rodean.

Asegúrate que cuando ames, sea un amor auténtico. Y no un amor disfrazado de “Te amo, pero espero que algún día cambies”. Asegúrate que sea un amor que no espera nada a cambio, si llegas a amar así aun cuando la persona es todo lo contrario a lo que tú haces, ahí estarás andando como Jesús.

Que tu objetivo sea el de traer destellos del cielo a la tierra, a los que te rodean. Ora e intercede por sus vidas. Que cuando te vean, vean a Jesús.

Gracias por completar este devocional.
Si fue de bendición me encantaría que me escribieras y cuentes. https://www.instagram.com/josemoralessm/