Preguntas para DiosMuestra

Si Dios es real, ¿por qué existen el mal y el sufrimiento? 

Cuando observamos toda la maldad que existe, puede ser muy difícil creer en la existencia de un Dios todopoderoso, omnipotente, amoroso, y bondadoso. Si bien el problema del mal y el sufrimiento refuta la mayoría de dioses, no refuta al Dios cristiano. 

¿Por qué? Por causa de Jesús. Jesús es Dios en forma humana. Jesús entró en la maldad y el sufrimiento de nuestro mundo, enfrentándolo y eligiendo morir en la cruz para que pudiéramos tener vida con Dios. Jesús es la mejor imagen que tenemos de Dios. Jesús sufrió. Y Jesús murió. Jesús es el Dios revelado a través del sufrimiento..

A través de Su muerte en la cruz, Jesús tomó el máximo símbolo de muerte y destrucción y lo uso para traer vida y salvación al mundo. 

El hecho de que veamos el mal y el sufrimiento como un problema es, sorprendentemente, evidencia de Dios. ¿Por qué? Porque sin Dios no existiría el bien y el mal. Porque si no hay Dios no hay una moralidad objetiva. Sin Dios, el universo no es más que átomos chocando contra átomos. Lo que significa que no hay bueno o malo, solo cosas que personalmente nos gustan o no nos gustan. 

Pero en el fondo, cuando vemos el mal y el sufrimiento, tenemos esa profunda sensación de que no debería ser así. 

C.S. Lewis, un antiguo ateo que se convirtió al cristianismo, lo dijo de esta manera: “Las sombras prueban la luz del sol". 

Él está diciendo que la existencia del mal (sombras) es evidencia de que existe el bien (la luz del sol). Sin moralidad objetiva, el bien y el mal no existen. La moralidad objetiva no puede existir sin Dios. 

En la tradición cristiana, el mal y el sufrimiento entraron por primera vez en el mundo en un evento llamado la caída. Porque Su naturaleza es amorosa, Dios creó a la humanidad con la libertad para elegir. El amor no puede existir sin elección. Esa libertad significa que los humanos pueden elegir el bien o el mal. La caída fue el momento en que la humanidad tomó lo que Dios había destinado para bien y lo usó para mal. Fue entonces cuando el pecado entró en la escena. El pecado es más que un simple error. El pecado es una enfermedad que ha infectado a la humanidad y corrompido la creación. El mal y el sufrimiento que vemos en el mundo de hoy son los efectos de esa enfermedad. 

Y desde el principio, Dios ha estado usando el mal y el sufrimiento para el bien. En ninguna parte es esto más evidente que en la cruz, donde Jesús tomó lo peor que este mundo tiene para ofrecer y lo usó para traer lo mejor de Dios: la vida de resurrección. 

Lo que Dios hizo entonces fue solo el comienzo. Debido a la muerte y resurrección de Jesús, llegará un día en que cada cosa mala será hecha buena, toda herida se sanará, cada sufrimiento será curado, cada cosa rota será restaurada, y la maldad y el sufrimiento no existirán. 

El cristianismo es la historia de lo que Dios ha hecho, lo que Dios está haciendo, y lo que Dios hará sobre el problema del mal y el sufrimiento.