Espíritu Santo para todos los díasMuestra

Día 2: Buscar al Espíritu Santo

Al Espíritu Santo hay que buscarlo. Dice la Palabra que si lo buscamos de todo corazón, Él se manifestará. Muchas veces buscamos superficialmente y difícilmente lo encontraremos de este modo. Vivimos en una época donde queremos todo rápido y sin esfuerzo. Esperamos que Él nos hable y no le buscamos. Él quiere que nos mantengamos en oración y lo busquemos con todo el corazón. Para alcanzar lo que Dios tiene para nosotros hay que profundizar en nuestra búsqueda.

Buscar más de Dios implica despojarme de las cosas que no me acercan a Él. Es momento de que dejes de lado esas cosas, hábitos, amistades y relaciones, y decidas consagrarte a Jesús. Que tu prioridad a partir de ahora sea el Espíritu Santo; así  podrás decirle que no al mundo, para darle el «sí» a Dios.