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Ir a la misión juntos

Fuiste hecho para una misión. Dios quiere que compartas su amor con otras personas: tus amigos, tu familia y las personas con las que trabajas, que no pertenecen a familia de Dios.

¿Por qué quiere Dios que hagas eso? Porque quiere a todos en su familia. Dios nunca ha hecho a nadie a quien no ame y para quien no tenga un propósito. Dios nunca ha hecho a nadie por quien Jesucristo no haya muerto. Así que Dios quiere que compartamos esas Buenas Nuevas.

¡Pero no estás solo! Dios quiere que vayas a la misión con otras personas. Filipenses 1:27 dice: «Están firmes y unidos en un mismo espíritu y propósito, luchando juntos por la fe, es decir, la Buena Noticia» (NTV).

¿Cómo compartes con tus amigos que Dios los ama? ¿Y cómo lo haces en colaboración con otras personas? Lo haces a través de tu grupo pequeño.

Primero, oráis juntos. Le pides a tu grupo pequeño que ore por tus amigos que no tienen una relación con Dios. No puedes obligar a nadie a amar a Dios, pero puedes orar por ellos. Tus amigos pueden rechazar tus argumentos o negarse a escuchar tu razonamiento. Pero no pueden hacer nada contra tus oraciones. ¡Van directo a su corazón!

La Biblia dice en Colosenses 4:3: «Oren también para que Dios nos conceda muchas oportunidades de proclamar el mensaje» (NBV).

Cuando oras por oportunidades, ¿sabes qué sucede? ¡Empiezas a verlas por todas partes! La oración te hace consciente. Cuando comienzas a orar por tu familia, empiezas a ver las necesidades de tu familia. Cuando empiezas a orar por tus compañeros de trabajo, empiezas a preocuparte por ellos.

Y a medida que vas conociendo mejor a las personas que te rodean, puedes empezar a aprovechar vuestros intereses en común y crear oportunidades para compartir el Evangelio con ellos.

Antes de que puedas compartir las Buenas Nuevas con los demás, tienes que establecer una relación con ellos. ¿Cuáles son vuestras experiencias, intereses y necesidades en común? Habla con las personas de tu grupo pequeño sobre las cosas que te gusta hacer y luego pregunta: «¿A quién conocemos que disfrute haciendo lo mismo y aún no es creyente? ¿A quién podemos invitar a que se una a nosotros?»

En la iglesia Saddleback hay un grupo pequeño cuyos miembros son todos fans de San Diego Chargers. Todos en el grupo compraron pases de temporada para los partidos de los Chargers. Luego todos cooperaron y compraron dos pases más. Cada vez que van a un partido, se llevan con ellos a dos personas nuevas. Van y se lo pasan genial en el partido, y al final dicen: «¿Te lo has pasado bien? Este mismo grupo se reúne los jueves por la noche en casa de Bob. ¿Te gustaría unirte a nosotros?»

Dios proveerá todo tipo de oportunidades e ideas como esta. Comienza a orar por esto con tu grupo pequeño, y abrid los ojos para identificar a las personas a vuestro alrededor a quienes podáis servir juntos.

Reproduce la enseñanza en audio del día del pastor Rick >>