Fruita FrescaMuestra

Día 6 | Paciencia

La paciencia no está en la mayoría de nuestros "10 principales" deseos.

Esperando en la fila.

Esperando el final del invierno.

Esperando una mesa.

Esperando un esposo.

Esperando en el tráfico.

Esperando un ascenso.

Esperando que los bebés se queden sin pañales.

Esperando un diagnóstico.

Esperando a un buen amigo.

Esperando la libertad financiera.

Esperando que suene el teléfono.

Esperando el momento perfecto.

A la espera.

Y luego está esperando a Dios.

Creemos que tenemos una idea completa y nunca parece moverse cuando creemos que el momento es perfecto.

¿No es sorprendente que cuando se mueve, vemos cuánto más Él sabía?

Él puede ver lo que no podemos ver y siempre vale la pena esperar. Comienza a practicar paciencia.

Pensemos en la paciencia.

La vida en sí misma te enseñará paciencia.

En este mundo vertiginoso en el que vivimos, solo la inconveniencia de un atasco de tráfico o una interrupción en nuestro día bien planificado pueden hacernos caer en picada. Estamos acostumbrados a conseguir lo que queremos cuando lo queremos; cielo no permita que nos pongamos en línea con el aprendiz y una persona que nos adelanta y necesita una revisión de precios.

Al igual que las frutas que ya hemos estudiado, se aprende la paciencia. Tenemos que practicar una reacción intencional de calma ante las sorpresas que trae la vida y los hitos que estamos esperando para cruzar. No siempre podemos controlar lo que nos sucede, pero podemos controlar nuestra reacción. Necesitamos aprender a agradecer a Dios por todas y cada una de las etapas de nuestras vidas ... luchas de trabajo, tensiones en las relaciones, problemas que no podemos resolver, amigos que simplemente no lo entienden. Recuerda, no serías quien eres si no hubieras estado donde has estado. Gracias a Dios por confiar en ti lo suficiente como para ayudarte a crecer, y por darte ojos para ver su provisión al final.

Enumera algunas cosas que están probando tu paciencia hoy. A veces podemos evitar la confusión que causa impaciencia si planificamos que nuestro día sea proactivo en lugar de reactivo. ¿Cuál es la gran imagen de tu día? ¿Qué puedes hacer para planificar el futuro? ¿Cuáles son algunas formas y acciones prácticas que puede tomar para cambiar su punto de vista y relajar su espíritu?

Albert Einstein dijo: "Dios no juega a los dados".

Dios no está probando cosas nuevas en tu vida.

Él no está adivinando el resultado.

Él te hizo.

Él te conoce.

Y Él tiene todo bajo control.

Busque en la Palabra el llamado de Dios para que confíe en Su tiempo y Su dirección en todo, desde sus decisiones diarias hasta sus metas para toda la vida.