Estímulo Navideño por Greg LaurieMuestra

La Navidad es un día de gozo. Pero para mi y mi familia, también está marcado por tristeza, porque es un día en que la ausencia de Christopher se siente intensamente.

Debo decirte, Chris amaba la Navidad! Siempre fue una gran cosa para él de pequeño, y cuando se convirtió en padre, quería que sea algo grande para sus hijas. Él siempre fue muy considerado en su elección de regalos y a menudo los hacía a mano, lo que siempre era un trato especial para mí. Él también tenía un "talento para envolver" impresionante, del cual yo estoy completamente desprovisto.

En esa primer noche de Navidad, cuando los pastores cuidaban de sus manadas, el ángel trajo esta buena nueva: "Pero el ángel les dijo: No temáis; porque he aquí os doy nuevas de gran gozo, que será para todo el pueblo:" (Lucas 2:10).

Así es como el cielo celebró la primer Navidad. En esta noche santa, en efecto, el cielo momentáneamente vino a la tierra. El cielo y la tierra son co-existentes, pero algunas veces pueden verse como mundos distintos y otras veces separados solamente por un fino velo. Cuando esta tragedia golpea, cuando una enfermedad prevalece, el cielo puede, algunas veces, verse distante.

Pero cuando nos unimos a los ángeles en adoración, y vemos a Dios en Su grandeza, el cielo puede verse tan, tan cercano... Para nosotros como creyentes, estamos sólo a un latido del cielo justo ahora. Como David dijo, "...y ciertamente, vive Jehová y vive tu alma, que apenas hay un paso entre mí y la muerte." (1 Samuel 20:3)

La Navidad en el cielo es mejor que la Navidad en la tierra. Es puro gozo. No hay luces titilantes, sino la luz radiante del cielo mismo. No hay ángeles de metal en árboles, sino reales, ángeles santos de Dios por todos lados.

Verás, en el cielo hay paz. En la tierra hay guerra. En el cielo hay armonía perfecta. En la tierra hay fricción entre la familia y amigos. En el cielo, banquetes y perfección. En la tierra hay comida que engorda y expande la cintura.

No necesitamos dolernos por nuestros seres queridos que están celebrando la Navidad en el cielo, sino que nos dolemos por nosotros mismos por su ausencia.

Hoy, en cambio, recuerda hacerles saber a tus seres queridos en la tierra que los amas. Diles verbalmente. Porque nunca sabes si tu o yo o alguien por quien tenemos afecto puede estar en el cielo la próxima Navidad.

Copyright © 2011 por Harvest Ministries. Todos los derechos reservados. Escritura tomada de la Nueva Versión Rey James. Copyright © 1982 por Thomas Nelson, Inc. Usado con permiso. Todos los derechos reservados.