Aquí esperándote, un viaje de Adviento de EsperanzaMuestra

REFLEXIÓN

Un Salvador había sido prometido al pueblo de Dios durante siglos. Anhelaban y oraban por un rescate. Y entonces, en el día exacto, en el lugar exacto, en el momento exacto, Jesús nació. Mientras Dios casi nunca llega en el momento designado por nosotros, siempre llega en el momento exacto.

Todos nosotros estamos esperando por algo, a menudo preguntándonos si Dios se ha olvidado de nosotros. En tu espera, deja que el nacimiento de Cristo te dé aliento. Solo porque Dios no haya llegado (por lo que puedes ver), no significa que te haya abandonado. Para Él, un día es como mil años, y mil años son como un día. En este mismo momento está trabajando para su gloria y para tu bien. Aunque las circunstancias digan lo contrario, Dios va a llegar, a tiempo, cumpliendo los planes que tiene para ti desde hace mucho tiempo. No te rindas antes de que llegue el momento exacto.

Cobra esperanza en el pesebre y recuerda que eres amado y valorado por el Dios que bajó del cielo y llegó en el momento exacto para ti.

MEDITACIÓN

Escucha el alegre sonido

¡Escucha el alegre sonido! El Salvador viene,
El Salvador prometido largo tiempo;
Que cada corazón prepare un trono,
Y cada voz, una canción.

Viene para liberar a los prisioneros,

Cautivos en la esclavitud de Satanás.
Las puertas de bronce estallan ante Él, 
Las cadenas de hierro ceden.

Viene a sanar el corazón roto,
A curar el alma que sangra,
Y con los tesoros de su gracia
A enriquecer al pobre humilde.

Nuestros alegres hosannas, Príncipe de Paz,
Proclaman tu bienvenida,
Y la bóveda eterna de cielo suena
Con tu amado nombre.

Philip Doddridge,1702–1751

ORACIÓN

Padre, encuéntrate conmigo en mi espera, el lugar en el que anhelo lo que todavía no está completamente a la vista. Calma mi corazón y dame la habilidad de saber que estás cerca. Creo que tus planes son buenos. Lo veo en el nacimiento de tu único Hijo.

Pero a veces lucho para ver más allá de la niebla que me rodea. Renueva mi confianza mientras alzo mis ojos a Ti. Sé glorificado en mi vida durante esta época de espera. Amén.