Vive, ama, lideraMuestra

«Cuarta parte: Un futuro glorioso - Eternidad ante tu vista.»

Lo veas o no, las semillas de tu futuro glorioso ya han sido plantadas. Tus distintas experiencias de vida, tus relaciones e incluso tus errores han contribuido a fertilizar esas semillas de propósito. La ruta de Dios hacia tu futuro glorioso se basa en su sentido único de dirección, no en la ruta lógica y directa que tú puedes imaginar.

La puerta de entrada a tu futuro glorioso probablemente ya esté abierta, esperando que la empujes y entres por ella. Si estás frustrado por los sueños no realizados y las decepciones continuas, pídele a Dios que te muestre el paso que debes dar hoy, la prioridad principal para mantenerte en movimiento hacia delante.

Siempre espera lo mejor para el futuro. Si ves el futuro a través del remordimiento, el pasado, las decepciones o el dolor, entonces perderás de vista la bondad de Dios. Si vives lo suficiente te darás cuenta de que la vida puede ser dolorosa. Pero no importa lo que estés enfrentando o lo que está sucediendo a tu alrededor, debes esperar lo mejor para el futuro en el nombre de Jesús.

Dios te ha dado su Palabra sobre tu futuro: «Porque yo sé muy bien los planes que tengo para vosotros, planes de bienestar y no de calamidad, a fin de daros un futuro y una esperanza» (Jeremías 29:11). Si crees que Dios es quien dice ser, entonces tienes que saber que, de alguna manera, un futuro glorioso te espera. Un futuro que te va a sorprender y va a satisfacer tus deseos más profundos. Un futuro que reflejará la bondad y el poder de Dios, su gloria y su gracia.

Permanece en este camino, amigo mío. Sigue a Jesús y Dios te coronará con su bondad. Tienes una herencia increíble en el nombre de Jesús, una montaña que dominar y un camino en el que debes ser pionero. Tienes un carril de fe que es todo tuyo, una esfera de gracia que está esperando que la ocupes. El camino difícil y la vergüenza de tu pasado no pueden competir con su nombre, su poder sanador y su santo llamado. ¡Tus dones únicos se adaptan perfectamente para realizar su propósito en esta generación, y tu vida abierta y espaciosa, ordenada por Dios, está esperando que entres en ella! Vive, ama y lidera como Jesús, y tu vida en la tierra y en el cielo reflejará la gloria continua de Dios, ¡en todas las cosas!

No hay duda, ¡lo mejor de tu vida está por venir!

Oración: Te agradezco, Señor, por el futuro glorioso que me espera. Muéstrame hoy el siguiente paso a seguir, que me guíe y me mantenga en tu camino, y que la eternidad siempre esté ante mi vista. ¡Aleluya!