ROMANOS 4:4-8
ROMANOS 4:4-8 BLP
Por otra parte, el salario del que trabaja no es un regalo, sino una deuda. De modo que quien no pone su confianza en las propias obras, sino que se fía de Dios, que justifica al pecador, efectivamente su fe le justifica. Igualmente David llama dichoso a aquel a quien Dios le tiene en cuenta la justicia con independencia de las obras: ¡Dichosos aquellos a quienes Dios ha perdonado sus culpas, y aquellos cuyos pecados ha sepultado en lo profundo! ¡Dichoso aquel a quien el Señor no le toma en cuenta su pecado!