APOCALIPSIS 10:5-11
APOCALIPSIS 10:5-11 BLP
Entonces el ángel que yo había visto de pie sobre el mar y la tierra firme, levantó al cielo la mano derecha y pronunció este juramento: —Por el que vive por siempre y para siempre; por el que creó el cielo, la tierra, el mar y cuanto en ellos se contiene, juro que el plazo se ha cumplido y que en aquel día, cuando el séptimo ángel se disponga a tocar su trompeta, Dios cumplirá su plan secreto anunciado como buena noticia a sus servidores los profetas. Y la misma voz que había escuchado desde el cielo, de nuevo me hablaba y me decía: —Vete y toma el libro que tiene abierto en su mano el ángel que está en pie sobre el mar y la tierra firme. Me acerqué al ángel y le pedí que me diera el libro. Él me contestó: —Tómalo y cómetelo. Aunque te amargue las entrañas, será en tu boca dulce como la miel. Tomé, pues, el libro de la mano del ángel y me lo comí. Y resultó verdaderamente dulce como la miel en mi boca, pero amargo en mis entrañas una vez que me lo comí. Y me dijo alguien: —Debes aún proclamar un mensaje profético sobre multitud de pueblos, razas, lenguas y reinos.