21 Días De Ayuno Y Oración Con La Iglesia Transformation ChurchSample

Adoración Es Mi Arma

La adoración es una parte fundamental de nuestro caminar con Dios. Es la parte donde no nos enfocamos en nosotros mismos, sino que elegimos darle honor y gloria a Dios. La adoración nos permite poner a un lado nuestras preocupaciones, darle a Dios la alabanza que se merece y entregarle todo. La adoración es una decisión, cuando cantamos canciones y entregamos nuestra vida por completo a Cristo, elegimos adorarlo. A veces nos cuesta adorar debido a las circunstancias, situaciones de la vida o si simplemente no "tenemos" ganas de hacerlo. Sin embargo, podemos elegir adorar a Dios a través de todas las cosas porque no importa si Él hace algo por nosotros o no, Él es digno de nuestra alabanza. Jesús vino a la tierra, vivió una vida sin pecado y murió para que podamos tener una relación con Dios. Esa es razón suficiente para que lo adoremos. Dios nos salvó, nos ha cambiado y continúa moviéndose en nuestra vida de maneras milagrosas. La adoración va más allá de las canciones que cantamos, es una forma de vida. Toda nuestra vida puede ser adoración a Dios. Hoy elegiremos decir “Lo Haré”. Adoraré a Dios cuando no tenga ganas. Le daré a Dios mi vida entera como sacrificio vivo. Le daré a Dios la adoración y la alabanza que se merece sin importar lo que estés pasando, pero tienes la opción de adorar a Dios en todo. Elige hoy que vas a usar tu vida para adorar a Dios.

Preguntas de Reflexión:

• ¿Qué cosas de tu vida te impiden adorar a Dios por completo?
• ¿Cómo puedes adorar a Dios en tu vida diaria (en el trabajo, en casa, etc.)?
• ¿Cómo ha cambiado la adoración a Dios tu relación con Él?

Oración:

Dios, gracias por ser digno de nuestra adoración. Gracias en todo lo que hacemos, podemos elegir adorarte. Ya sea a través de una canción, en el trabajo o en nuestro hogar, ayúdanos a adorarte y reverenciarte. Cuando elijamos adorarte, ven y quédate con nosotros. Dios, ahora mismo Te adoro, Te honro y Te agradezco por ser un buen Dios. Hoy, ayúdame a adorarte más y continúa mostrándome cuán digno eres de toda adoración. En el nombre de Jesús, amén.