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Jesús, la fuente de vida abundante

En un mundo lleno de desafíos, incertidumbre y caos, es fácil perder de vista la promesa de vida abundante que Jesús nos ofrece. El capítulo 10 del Evangelio de Juan nos recuerda que Jesús es el Buen Pastor, la puerta por la cual entramos para encontrar vida y vida en abundancia. Sabemos que Jesús nos ha dado la salvación, pero a menudo no disfrutamos plenamente de la vida abundante que Él nos ofrece.

La vida abundante que Jesús promete no es una vida libre de problemas o dificultades, sino una vida llena de propósito, paz y seguridad bajo su cuidado. Él nos llama a vivir en libertad, una libertad que no consiste en hacer lo que queramos, sino en cumplir con el propósito para el cual fuimos creados.

Para disfrutar de esta vida, debemos primero entrar por la puerta que es Jesús, reconociendo que solo en Él encontramos el verdadero significado de nuestra existencia. No se trata solo de estar en el "redil", sino de vivir una vida que refleja la paz y la seguridad que encontramos en Cristo.

Acción Práctica: Hoy, toma un tiempo para reflexionar sobre las áreas de tu vida donde no estás experimentando la plenitud que Jesús ofrece. Ora y entrega esas áreas al Buen Pastor, pidiéndole que te guíe a disfrutar de la vida abundante que ha preparado para ti. Además, comparte con alguien más sobre el amor y la vida abundante que Jesús te ha dado, mostrando a otros la puerta abierta que es Cristo.