El Pastor De La Número 100Sample

La tercera oveja de las 100: La traicionada

Todos conocemos la historia de José, y muchos hemos sentido esa impotencia al ver cómo sus propios hermanos lo vendieron por celos. Ese sentimiento de injusticia me ha acompañado, llevándome a comprender que es parte de mi llamado hacia los "hijos pródigos", esas "ovejas número cien" que son a menudo vistas como rebeldes o problemáticas. Sin embargo, Dios nos recuerda en Ezequiel 34, la responsabilidad de cuidar a los débiles y buscar a los perdidos.

Como José, muchos de nosotros hemos sido traicionados sin ser responsables de ello. A lo largo de su historia, vemos cómo José, a pesar de las injusticias y soledad, se convierte en una figura clave en Egipto; esto no ocurre por casualidad, sino que es parte de un propósito divino. A través de cada desafío, Dios prepara a José para su promoción. Lo que parece un mal momento, en realidad, es la forma en que Dios trabaja para el bien y para cumplir su propósito.

No sé lo que has enfrentado o quién te ha traicionado; tal vez fue un amigo, una pareja, o incluso una congregación. Pero quiero que recuerdes que esto no es el final. Hay un Dios fiel, que ha enviado a su Hijo para salvarte y lucha por ti cada vez que decides alejarte. Él está aquí, no se ha ido. Le perteneces, y aunque la traición duele, el perdón es el camino que nos acerca a Jesús.

Te invito a abrir tu corazón y dejar ir el rencor, así como José lo hizo con sus hermanos. Solo de esta manera, podrás experimentar nuevos vientos que refresquen tu alma. Te aseguro, desde mi propia experiencia, que eso cambiará cómo te sientes cada día.

OREMOS:

Querido Papa ayúdame en el camino del perdón. Si bien sé que es una decisión, guíame a perdonar cada día hasta ya no sentir molestia ni dolor al ver a quienes me han lastimado.

Te pido que tu amor inunde mi ser. En tu hermoso nombre. Amén.