La Biblia, ¿qué es?Sample

Los niños, adolescentes y jóvenes son naturalmente curiosos. Quieren saber cómo funciona el mundo y por qué las cosas son como son. "¿Qué estás haciendo?". "¿Qué es eso?". Y, "¿por qué?", son preguntas que le hacen a los padres, maestros, vecinos, ¡o cualquiera que les responda!

¡Dios también ama nuestras preguntas! Algunas preguntas no serán respondidas hasta que lo conozcamos cara a cara, y otras, sabía que la haríamos, así que puso información, respuestas e historias en la Biblia para que pudiéramos conocerlo y saber cómo es. Eso es parte del camino de la fe: descubrir el carácter y la naturaleza de Dios.

Jesús hizo que un líder religioso muy importante llamado Nicodemo viniera a Él en secreto una noche, y Nicodemo tenía preguntas. Juan 3 registra su conversación, y Jesús respondió las preguntas de Nicodemo pero no como él esperaba. Tuvo que luchar con lo que Jesús le dijo acerca de la necesidad de un nuevo nacimiento, de nacer de nuevo, ¡no en el sentido físico, sino en el espiritual! Jesús quería que él supiera que había una manera de empezar de nuevo.

Al igual que Nicodemo, estamos invitados a una conversación con Dios. A través de la Palabra de Dios, lo escuchamos hablar con nosotros y luego, a través de la oración, tenemos la oportunidad de hablar con Él: decirle cómo nos sentimos, hacerle preguntas, pedir ayuda para nosotros mismos o para otros que están sufriendo.

Este ritmo de conversación con Dios es cómo Él interactúa con nosotros y cómo podemos acercarnos más a Él. Al igual que respirar, debemos inhalar la Palabra de Dios y exhalar a través de la oración y la adoración.

Dios quiere tener una conversación contigo hoy porque quiere que conozcas Su amor y lo conozcas como tu Padre.

Considera: ¿Qué significa nacer de nuevo, tener un nuevo nacimiento, que viene de Dios? Como hijo de Dios, ¿qué tipo de conversaciones puedo tener con mi Padre?

Reflexiona: Lee los pasajes de las Escrituras y escribe en un diario tus pensamientos y conclusiones como parte de tu conversación con Dios.

- ¿Qué te está diciendo?

- ¿Cómo te afecta lo que te dice?

- ¿Qué deberías aceptar o cambiar ahora?

- ¿Qué quieres decirle a Dios de tu parte?