La Alegría Y El Gozo De Vivir en Su PresenciaSample

Si observas con atención, vas a descubrir que cada país o cultura, tiene su propia definición de lo que ellos consideran el camino hacia la felicidad o el gozo. Si le preguntas a un danés, ellos dirán que sentarse frente a la chimenea en una noche fría, vestido con un suéter grueso de lana y acompañado de la persona que más amas o la familia, bebiendo un vino caliente con azúcar o una buena taza de chocolate y especias, y de paso acariciar a tu perro quien descansa a tu lado, es la felicidad o el“hygge” lo acogedor de las cosas cotidianas. El gozo lo describen como una actitud total frente a la vida y la capacidad de encontrar bienestar o felicidad a través de las pequeñas cosas.

El secreto de los suecos para ser los mejores en su trabajo y encontrar felicidad o gozo en lo que hacen se llama“Fika” que no es otra cosa que el momento del café o el té en la oficina, toda una celebración, un momento para socializar y disfrutar el tiempo de calidad con los compañeros de trabajo o en la iglesia. La“Fika" sueca o los descansos en medio de la jornada provista por los empleadores, provee un espacio de oxigenación para liberar el estrés de las extenuantes jornadas laborales y fortalecer las relaciones.

Los japoneses por su parte prefieren la soledad, la quietud y la frescura que les puede ofrecer la naturaleza, pero más específicamente aducen a que la felicidad o el gozo surge con la belleza y la serenidad que afloran con los años y el compartir con personas tranquilas, que cuidan de sus amigos y disfrutan del entorno que les rodea, la felicidad o“Ikigai” surge de la belleza de la simplicidad y el desgaste o sabiduría que trae la edad.

El gozo y la felicidad es algo que todos anhelamos. Pero, ¿qué o quién nos muestra el camino verdadero hacia la felicidad o el gozo que trasciende lo material, las dificultades o la emoción del momento? Como personas de fe, el gozo está destinado a ser un sello distintivo de aquellos que caminamos con Dios y decidimos confiar plenamente en Él.

Descubramos juntos en los próximos devocionales la senda antigua hacia la alegría y gozo: habitar en la presencia de Dios.