Quién Dices Que Soy - Parte 2Sample

Los laberintos de arbustos, o de campos de maíz, son muy divertidos… hasta que te pierdes. Es difícil ver cuál es el camino y ¡empiezas a preguntarte si conseguirás salir en algún momento!

Nosotros solos estamos perdidos en un laberinto de pecado y no podemos salir, necesitamos que alguien que conoce el camino nos guíe hasta la salida. Jesús no solo conoce el camino, Él es el camino. Jesús murió y resucitó para que podamos ser salvos del pecado. El pecado nos mantenía perdidos y separados de Dios, pero gracias a Jesús fuimos encontrados. Soy quien Dios dice que soy, y Dios dice que soy encontrado. 

Lee los versículos de hoy para aprender cómo Jesús nos hizo libres.