La Biblia con Nicky y Pippa Gumbel 2021Sample

Encuentra tu equilibrio

Mi cuerpo es muy poco flexible. En una ocasión, un entrenador de fitness profesional que se dio cuenta de cómo caminaba y me dijo que era uno de los peores casos de falta de flexibilidad con los que se había encontrado. ¡Ahora intento hacer más estiramientos!

 

Me considero razonablemente en forma (¡para mi edad!), debido a que sigo jugando al squash y voy en bicicleta a todos los lugares. Pero en otros aspectos, me doy cuenta de que no lo estoy. La forma física es un equilibrio entre fuerza y flexibilidad, así como entre forma aeróbica y anaeróbica. Alguna gente es excepcionalmente fuerte pero ni siquiera puede correr para alcanzar un autobús. Otros, están muy en forma aeróbica (podrían correr un maratón), pero no son muy fuertes.

 

Pero el fitness o forma espiritual, es muchísimo más importante que la forma física. También conlleva equilibrar un cierto número de áreas en tu vida.

Proverbios 29:19-27

1. Humildad y confianza

 

Me resulta muy difícil mantener el equilibrio entre la humildad y la confianza. Ha habido momentos en mi vida en los que no me he sentido con mucha confianza. En otros momentos, he sentido una gran confianza, pero quizás me ha faltado humildad.

 

Hay mucho que ponderar en el pasaje de hoy de Proverbios el cual trata sobre el no hablar antes de pensar (v.20), controlar el mal temperamento y la ira (v.22) y confiar en Dios como la fuente definitiva de justicia (v.26).

 

Especialmente, me doy cuenta de este equilibrio entre la humildad y la confianza: «El altivo será humillado, pero el humilde será enaltecido» (v.23). Este tema es constante en Proverbios (11:2; 18:12; 21:4; 22:4).

 

Ten confianza en el Señor, no vivas bajo el miedo de lo que los demás puedan pensar o hacer. «Temer a los hombres resulta una trampa, pero el que confía en el Señor sale bien librado» (29:25).

 

La clave para mantener este equilibrio es evitar la confianza en uno mismo y practicar la humilde confianza en Dios, asegurándote de que tu confianza no proviene de tus propias habilidades o éxitos, sino de confiar en el Señor.

 

Señor, ayúdame a tener una confianza que venga de confiar en Ti, evitar temer a nadie y caminar humildemente ante Ti.

2 Juan 1:1-13

2. Verdad y amor

 

He aquí otro equilibrio difícil de mantener. El amor se vuelve blando si no es fortalecido por la verdad. La verdad se vuelve dura si no es suavizada por el amor. A veces, en mi vida he sido alguien muy apasionado con «la verdad», pero quizás no he sido muy amoroso. Otras veces, he intentado ser muy amoroso, pero he dejado que «la verdad» no me importe tanto.

 

En esta segunda epístola de Juan (probablemente escrita a una iglesia a la que se refiere como «la señora elegida», v.1), les advierte del peligro de las falsas enseñanzas que negaban el hecho que Jesús había venido a esta tierra en forma corporal, y por lo tanto era completamente divino y completamente humano. Juan urge a tener este bello equilibrio entre «verdad y amor» (v.2). De hecho, entremezcla ambos incluso en el saludo.

 

Escribe: «El anciano, a la iglesia elegida y a sus miembros, a quienes amo en la verdad —y no solo yo, sino todos los que han conocido la verdad—, a causa de esa verdad que permanece en nosotros y que estará con nosotros para siempre» (v.1).

 

Porque los ama, quiere verlos en persona y «cara a cara» (v.12, MSG). Las cartas escritas, los correos electrónicos, los mensajes de texto, las llamadas telefónicas, WhatsApp e incluso Skype o FaceTime, no son sustitutos de estar con alguien «cara a cara» (v.12) y hablar de corazón a corazón.

 

Los insta a amarse «los unos a los otros» (v.5) y a que «vivan ese amor» (v.6). El amor debería ser el objetivo de nuestra vida. Estudia el amor, habla de él y practícalo.

 

La prueba del amor es la obediencia a Jesús: «En esto consiste el amor: en que pongamos en práctica sus mandamientos Y este es el mandamiento: que vivan en este amor» (v.6).

 

La verdad y el amor no se oponen mutuamente sino que de hecho, se complementan. Juan está encantado de encontrar que esta iglesia esté «practicando la verdad» (v.4). La verdad importa, y se encuentra en una persona. Jesús dijo «Yo soy […] la Verdad» (Juan 14:6). Escucha la verdad, enséñala y ámala.

 

Allí afuera hay muchos embaucadores (2 Juan 1:7-8). Aférrate a la verdad y no te dejes engañar o saldrás perdiendo.

 

Solo si conocemos la verdad y nos aferramos firmemente a ella, perseverando en la enseñanza, tendremos «al Padre y al Hijo» (v.9).

 

El siguiente versículo no suena muy amoroso: «Si alguien los visita y no lleva esta enseñanza, no lo reciban en casa ni le den la bienvenida, pues quien le da la bienvenida se hace cómplice de sus malas obras» (v.10).

 

Pero de hecho, la pasión de Juan por la verdad emana de su amor por aquella iglesia. No está dispuesto a tolerar la falsedad porque los ama. Los falsos maestros pueden buscar que te pierdas; «cuídense de no echar a perder el fruto de nuestro trabajo» (v.8).

 

Señor, ayúdame a mantener este equilibrio entre la verdad y el amor, así como a siempre decir la verdad con amor (Efesios 4:15).

 

 

Hageo 1:1-2:23

3. Visión y acción

 

Un consultor de gerencia de alto nivel me dijo en una ocasión que «nunca se ha despedido a un director ejecutivo por falta de visión». Pero muchos son incapaces de llevar la visión a la acción.

 

Las visiones no funcionan a menos que tú funciones. En este pequeño libro de Hageo, vemos un maravilloso equilibrio entre la visión y la acción.

 

En cinco ocasiones, el Señor Todopoderoso dijo mediante el profeta Hageo: «¡Reflexionen sobre su proceder!» (1:5,7; 2:15 y dos veces en 2:18). La visión empieza por aprehender en nuestra mente una imagen de cómo podrían ser las cosas.

 

Ordena tus prioridades. Hageo desafió al pueblo de Dios acerca de sus prioridades. Estaban viviendo en casas cómodas mientras que el templo del Señor permanecía en ruinas (1:4) y decían: «Todavía no es el momento apropiado para ir a reconstruir la casa del Señor» (v.2).

 

El pueblo había decidido reconstruir el Templo, tenían buenas intenciones, pero no lo habían hecho aún porque no era su prioridad.

 

El profeta Hageo les urgió a que reflexionaran cuidadosamente acerca de sus caminos (v.5). Su preocupación primordial debía ser ver el nombre de Dios honrado (v.8), pero dejaban la casa de Dios en «ruinas» (vv.4,9).

 

Eugene Peterson escribe que hay «momentos en nuestras vidas en los que reparar el edificio donde adoramos es un acto de obediencia tan importante como orar en ese lugar de adoración».

 

Algunas personas estaban consternadas de que el nuevo templo no fuera todo lo espléndido que había sido el antiguo: «“¿Queda alguien entre ustedes que haya visto esta casa en su antiguo esplendor? ¿Qué les parece ahora? ¿No la ven como muy poca cosa? pues ahora, ¡ánimo” […], que yo estoy con ustedes! […]. Mi Espíritu permanece en medio de ustedes […]  El esplendor de esta segunda casa será mayor que el de la primera. Y en este lugar concederé la paz» (2:3-5, 9).

 

Estos son los versículos mediante los que Dios habló a Sandy Millar y a otros sobre el templo de HTB Onslow Square en julio de 1981, cuando aquella iglesia estaba a punto de ser cerrada y vendida como un bloque de apartamentos. Ese fue el tema de nuestro servicio de acción de gracias de 2010 en el que celebramos el 150 aniversario de aquella iglesia y la reapertura oficial después de tres años de obras de restauración.

 

Al contemplar la historia de lo que había sucedido en aquella iglesia, vimos que su gloria pasada había sido muy grande. Nuestra oración y esperanza para el futuro es que «el esplendor de esta segunda casa será mayor que el de la primera» (v.9).

 

En el libro de Hageo, después de haber tenido esta visión, tuvieron que ponerse manos a la obra porque «… ¡yo estoy con ustedes!» (v.4). Y así, comenzó el trabajo (1:14).

 

Cuando contemples la iglesia de tu país, reflexiona cuidadosamente acerca de tu proceder. No es correcto vivir en la comodidad mientras que la casa de Dios permanece en «ruinas». Dios quiere que la gente de tu país llegue a conocerlo y ser parte de Su iglesia. Visualiza cómo podría glorificarse a Dios en Su iglesia actualmente aún más de lo que se le ha glorificado en el pasado (2:9).

 

En primer lugar, «sé fuerte» (v.4). No te debilites por los ataques, las críticas o el desánimo. En segundo lugar «trabaja» (1:14; 2:4). Es un trabajo duro, pero no tiene nada de malo. Hay momentos en los que tienes que trabajar excesivamente duro. En tercer lugar, «no temas» (v.5). Esto sugiere que habrá cosas que puede que causen miedo.

 

Puedes confiar en Dios con las finanzas, pues el Señor declara: «Mía es la plata, y mío es el oro» (v.8).

 

La clave es que el Señor dice: «Estoy con ustedes […] y mi Espíritu permanece en medio de ustedes» (1:13; 2:5). Puedes superar todos tus miedos porque sabes que Dios está contigo.

 

Señor, ayúdame a equilibrar la humildad y la confianza, el amor y la verdad, la visión y la acción; a confiar en que Tú estás con nosotros y a trabajar duro para ver Tu nombre glorificado.

Pippa Adds

Pippa añade

 

Hageo 1:7,9

 

«¡Reflexionen sobre su proceder […] mi casa […] está en ruinas, mientras ustedes solo se ocupan de la suya».

 

¡Hay tanto que hacer en nuestro hogar! Reemplazar las cosas que se rompen, cambiar los bombillos, limpiar, ordenar, etc. Estoy segura de que Dios quiere que seamos buenos administradores de nuestra casa. Pero el versículo me recuerda que debo estar igual de interesada por la casa de Dios. Muchas iglesias están en un estado muy malo y no son adecuadas para Jesús. 

References

Notas:

 

Escritura marcada (MSG) es tomada de la traducción bíblica The Message, no está traducida al español, se parafrasea

 

Unless otherwise stated, Scripture quotations taken from the Holy Bible, New International Version Anglicised, Copyright © 1979, 1984, 2011 Biblica, formerly International Bible Society. Used by permission of Hodder & Stoughton Publishers, an Hachette UK company. All rights reserved. «NIV » is a registered trademark of Biblica. UK trademark number 1448790.

 

Scripture quotations marked (AMP) taken from the Amplified® Bible, Copyright © 1954, 1958, 1962, 1964, 1965, 1987 by The Lockman Foundation. Used by permission. (www.Lockman.org)

 

Scripture marked (MSG) taken from The Message. Copyright © 1993, 1994, 1995, 1996, 2000, 2001, 2002. Used by permission of NavPress Publishing Group. 

 

Notes for 2011:

 

«Action without a vision is stumbling in the dark, and vision without action is poverty-stricken poetry » it has been said. Warren Bennis, somewhat paraphrasing, taken from Mark Knight comments.

 

Another wrote, «Vision without action is merely a dream. Action without vision just passes the time. Vision with action can change the world. » (Joel Barker).

 

Notes for 2012

«Haggai keeps us in touch with those times in our lives when repairing the building where we worship is an act of obedience every bit as important as praying in that place of worship. » Eugene Peterson, The Message, introduction to Haggai, p.1300).