No Más Vergüenza Sample
Semana 3 - Día 1
David y la Vergüenza de Adulterio
Lectura: 2 Samuel 11; Salmos 103:10-11
DEVOCIONAL: Salmos 103:10-11
Ser un seguidor de Jesús no significa ser inmune al pecado. Vemos esto en la vida de David. Su relación con Betsabé fue un gran error moral. Un pecado llevó a otro y otro hasta que un buen hombre fue asesinado para cubrir el pecado de David. A pesar de todo esto, David fue considerado un hombre conforme al corazón de Dios. Nada es demasiado difícil de perdonar y redimir para Dios.
Si bien hay grandes consecuencias terrenales por el pecado, no todo está perdido. Cuando decimos que Dios perdona todo pecado, esto incluye el pecado de infidelidad. Él continúa amando profundamente a Sus hijos a pesar de cualquier agujero oscuro en el que podamos caer. Cuando la vergüenza amenaza con abrumarnos, podemos recordar y descansar en esta verdad: Él no nos trata conforme a nuestros pecados.
Como hermanos y hermanas en Cristo, no debemos evitar a los que caen, sino acompañarlos, confirmar que se equivocaron mucho, pero luego ayudarlos a volver al camino de la justicia. Cuando nos sentimos abrumadas por la gracia que hemos recibido en nuestras propias vidas, podemos mostrar una gracia y misericordia abrumadoras a los demás.
Oración
Señor, puedo mirar mis pecados y pensar que son demasiado grandes para ser perdonados. Recuérdame la historia de David y cómo los muchos pecados de un hombre pudieron ser perdonados y su vida restaurada, porque Tú eres un Dios de gracia, misericordia y poder. En el nombre de Jesús, amén.
Scripture
About this Plan
La vergüenza con la que cargamos necesita conocer al Único que nos redimirá por completo de ella. Sea que lo aceptemos o no, el poder de la vergüenza nos afecta a todas. Busca evitar que vivamos la vida de fe que Dios ha planeado para cada una de nosotras. Y nos priva de vivir nuestro potencial, nos cubre con remordimiento, inseguridades y dudas. Dios nos puede redimir de nuestra vergüenza.
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