YouVersion Logo
Search Icon

La MansedumbreSample

La Mansedumbre

DAY 8 OF 10

En nuestro estudio sobre el cambio que produce el Espíritu en nosotros, en especial la mansedumbre o humildad, no podemos dejar pasar este texto.

Jesús estaba en la tierra de Cafarnaúm. Había visitado las ciudades de Corazín y Betsaida, dos ciudades muy cercanas que están cerca del lago de Galilea. Eran muy prósperas y un centro religioso importante.

En Cafarnaúm estaba la sinagoga donde había pronunciado el texto de Isaías. Prácticamente les dijo que Él era el Mesías, pero no lo reconocieron. Según el relato de Mateo, estas ciudades son en las que más milagros hizo Jesús, y les reclama que si su predicación hubiera sido en ciudades paganas como Tiro y Sidón, la gente se hubiera arrepentido y habría cambiado su manera de vivir. Pero los habitantes de estas ciudades se creen tan puros y tan santos que no reconocen ni siquiera a Dios.

Jesús hace una oración increíble en ese momento: agradeció al Padre por haber mostrado su misericordia a los que no saben mucho, a aquellos a quienes los «sabios» llaman ignorantes, a los sencillos. No es que el conocimiento sea malo; la arrogancia con la que muchos alardean de su conocimiento es lo malo y pone una venda en los ojos.

Después les habla a quienes estaban con Él de su virtud de conocer al Padre, y aclara que nadie conoce al Padre. Por eso Él vino para darlo a conocer. Pero ese pueblo no estaba interesado en conocerlo. Estaba más interesado en defender su religión y parecer fieles a ella.

Ahí empieza la declaración que nos llama a este análisis. Jesús llama a los cansados y angustiados a que se acerquen a Él y les ofrece descanso. Les pide obediencia y que aprendan de Él. Y finalmente dice que debemos aprender de Él a ser pacientes y humildes de verdad. Jesús enfoca la mansedumbre como el descanso que ofrece a las angustias, carreras y competencias de esta vida. Solo tenemos que acudir a Él.

Day 7Day 9