Las 10 cualidades de un gran líderSample

2. NO PUEDO LIDERAR SIN SER LIDERADO

En muchos contextos, honrar al liderazgo se considera adulación e incluso idolatría, ya que creemos que esto puede avivar el ego de nuestros líderes y más que una ayuda sería un límite para ellos. Pero la Biblia nos anima en diversos pasajes a poder agradecer, ayudar y amar a nuestros responsables. Esto genera un ambiente saludable en la iglesia y construye un gran apoyo para seguir avanzando en su liderazgo sin ser una carga más para ellos. Además, el que podamos rendir cuentas a otros, entendiendo el orden necesario y la autoridad que existe sobre nosotros de parte de Dios, es algo esencial en cualquier liderazgo. Esto nos hace mantener los pies en el suelo al tener a una o varias personas que no sólo nos impulsan, guían y cuidan, sino también nos confrontan, corrigen e instruyen.

En ocasiones creemos que mantenernos bajo el liderazgo de alguien nos limita y frena en nuestro crecimiento y desarrollo personal. Pero la realidad es que esto nos hace crecer no sólo en nuestra capacidad, sino también en nuestro carácter. Me encanta la ilustración de una cometa que muchos de nosotros volábamos cuando éramos pequeños. La cometa se mantenía volando no solamente gracias al viento, sino también a la sujeción de la cuerda. Podríamos pensar que volaría con mucha más libertad si soltáramos su cuerda, pero la realidad es que es gracias a ella (y a los principios físicos correspondientes) puede mantenerse en el aire.

Una de las más asombrosas historias de honra y apoyo es la de Hur y Aarón en Éxodo 17 cuando Moisés tenía que mantener los brazos en alto para conseguir la victoria.

Es muy interesante que ambos estaban cerca de Moisés para ayudarle.
¿Cómo de cerca estás de tus líderes para apoyarles en el momento que lo necesiten?

Además lo sentaron en una roca, buscando su descanso y descargándole.
¿Estás haciendo que tus líderes se cansen o descansen?

Durante el tiempo que sujetaban sus brazos estaban dando ejemplo público al resto del pueblo, porque todos veían lo que estaban haciendo desde la colina.
¿Qué modelo de liderazgo estás enseñando a la iglesia?
¿Un modelo competitivo, celoso o servicial y de honra?

Y por último, dice la historia que estuvieron hasta la puesta del sol. Sostenerlos durante tanto tiempo no fue nada fácil, ya que tuvo que ser muy agotador. Hasta que la victoria llegó, no dejaron de estar a su lado, aún cuando a la gente ya no les veía tan claramente.
¿Estás honrando y apoyando todo el tiempo, aún cuando no te ven o también te cansas?

Oración: Señor te agradecemos por los líderes que has puesto en nuestras vidas. Gracias por su dedicación, apoyo y esfuerzo incondicional. Ayúdanos a ser siempre su apoyo y honrarlos no sólo públicamente, sino también en lo privado.