¡Atrévete! Pon Tu Fe En Acción.Sample
Atrévete a tener fe
Dios se complace en dar a aquellos que ponen su confianza en Él. ¡Él aprecia que nos atrevamos a hacer cosas por fe!
Seguramente que ya has pensado en todo lo que podrías hacer si no tuvieses límite alguno:
- Compondrías ese álbum o escribirías ese libro que tienes en mente desde hace tiempo,
- Abrirías ese orfanato,
- Le pedirías salir a ese chico, esa chica...
Muchos de nosotros no nos atrevemos a “molestar” a Dios con nuestras peticiones, hemos experimentado muchas veces el rechazo en nuestra vida. El rechazo nos espanta y nos paraliza. ¡Pero debes saber que Dios se alegra en bendecirte, y que no te rechaza!
“Hasta ahora nada habéis pedido en mi nombre; pedid, y recibiréis, para que vuestro gozo sea perfecto”
Atreverse, lanzarse, saltar… no es tan sencillo en la práctica. Pero la buena nueva es que Dios es un padre paciente que quiere verte cada vez más gozoso. Él cubre tus espaldas, lo tiene todo ya previsto. Pídele y te ayudará a desarrollar, poco a poco, todas las aptitudes que te faltan para dar el salto y tener una fe sana.
Oro para que todas las claves que vas a recibir en este plan puedas aplicarlas en tu vida y utilizarlas con fe. ¡Eres un(a) hij@ de Dios! Pide a tu Padre, y Él te dará un gozo perfecto.
Hoy, te invito a orar conmigo: “Señor, te doy gracias por Tu Palabra tan fuerte, tan bella y veraz. Ayúdame a atreverme a emprender para Ti, a soñar y a poner en marcha los proyectos que pones en mi corazón, para que Tu Nombre sea conocido, levantado y glorificado. Amén”
¡Gracias por existir!
Eric Célérier
PD: Estos textos han sido han sido extraídos de Un Milagro Cada Día, un email alentador que escribo y envío diariamente a miles de personas. Si quieres recibir cada día este mensaje de aliento en tu correo electrónico, puedes suscribirte en este enlace.
About this Plan
¿Has oído alguna vez la expresión “No consigues nada si no haces nada”? Es una expresión bastante directa, pero cierta. Cuando deseas algo, tienes que procurarte los medios para conseguirlo, ya que por sí mismo no vendrá a ti. Y para esto, hay un remedio: Tener el coraje de atreverse. Atreverse es hacer eso que tanto tememos, eso que no sabemos dónde nos va a llevar, pero es también dar ese paso que, por pequeño que sea, puede hacernos avanzar. Te propongo un recorrido de 3 días para aprender a atreverte en tu vida, con la ayuda de la Palabra de Dios. ¿Estás dispuest@? ¿Te atreves? ¡Tu vida va a cambiar!
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