Dos Reinos - Parte 1Sýnishorn

Reglas

¿Alguna vez te has sentido agobiado con las reglas de algún papá o maestro? ¡No comas en el sofá! ¡No corras en el pasillo! ¡No le digas así a tu hermana! Detente y piensa, ¿qué regla, de las que te ha dado un adulto, parece la más difícil de seguir? ¿Qué regla te irrita porque no la entiendes? Nuestro pasaje de hoy está cargado con algunas reglas bastante difíciles también. A primera vista puede parecer como que Jesús solo está añadiendo más y más reglas. A veces, tenemos que profundizar en lo que Jesús está diciendo para que podamos entender Su corazón.

Si tu mamá dice: “Nueva regla en la casa: No le digas tonto a tu hermano o vas a tener que lavar el baño”, puedes pensar que es una regla tonta. ¿Qué importa cómo le diga a mi hermano? ¿A quién le importa lo que yo piense de él? ¡Sólo es una palabra! Está bien, puede que tengas razón solo es una palabra. PERO a lo mejor hay algo más. ¿Cuál era tu intención detrás de lo que dijiste? ¿Lo dijiste para hacerle daño? ¿Lo dijiste estando enojado? Quizás la regla fue puesta para recordarte que debes guardar tu corazón de malas intenciones. Quizás eso es lo que Jesús está haciendo también.

Echemos un vistazo rápido al pasaje de hoy. En Mateo 5:21-32, Jesús está revisando algunas de las reglas con nosotros. Él explica la regla, lo que la gente PENSABA que significaba, y el corazón o la intención detrás de la regla. “Han oído que se dijo…pero Yo les digo…”. Piensa en las reglas que Él menciona: asesinato, adulterio, divorcio. Son cosas bastante fuertes. Jesús vas más a lo profundo. Él les dice que no se trata solo de la acción o del pecado, sino que también de lo que está en el corazón.

Profundiza: La próxima vez que te sientas agobiado por una regla, profundiza e intenta descubrir el corazón de Dios. Escribe una regla difícil de cumplir en tu vida y piensa cuál es la verdadera intención. ¿Podrán los demás ver mejor a Dios si tu sigues la regla?

Sé valiente: ¿Hay alguna regla en tu vida acerca de lo mencionado en el pasaje (asesinato, adulterio, divorcio) que has entendido mal? Examina tu corazón y pídele a Dios que te hable acerca de ellas. ¿Has herido a alguien u ocasionado que alguien peque? Sé valiente y habla con esa persona hoy.

Memoriza: “Cualquiera, pues, que anule uno solo de estos mandamientos, aun de los más pequeños, y así lo enseñe a otros, será llamado muy pequeño en el reino de los cielos; pero cualquiera que los guarde y los enseñe, este será llamado grande en el reino de los cielos” (Mateo 5:19 NBLA).