Salmos 37:4-40
![Salmos 37:4-40 - Deléitate asimismo en Jehová,
Y él te concederá las peticiones de tu corazón.
Encomienda a Jehová tu camino,
Y confía en él; y él hará.
Exhibirá tu justicia como la luz,
Y tu derecho como el mediodía.
Guarda silencio ante Jehová, y espera en él.
No te alteres con motivo del que prospera en su camino,
Por el hombre que hace maldades.
Deja la ira, y desecha el enojo;
No te excites en manera alguna a hacer lo malo.
Porque los malignos serán destruidos,
Pero los que esperan en Jehová, ellos heredarán la tierra.
Pues de aquí a poco no existirá el malo;
Observarás su lugar, y no estará allí.
Pero los mansos heredarán la tierra,
Y se recrearán con abundancia de paz.
Maquina el impío contra el justo,
Y cruje contra él sus dientes;
El Señor se reirá de él;
Porque ve que viene su día.
Los impíos desenvainan espada y entesan su arco,
Para derribar al pobre y al menesteroso,
Para matar a los de recto proceder.
Su espada entrará en su mismo corazón,
Y su arco será quebrado.
Mejor es lo poco del justo,
Que las riquezas de muchos pecadores.
Porque los brazos de los impíos serán quebrados;
Mas el que sostiene a los justos es Jehová.
Conoce Jehová los días de los perfectos,
Y la heredad de ellos será para siempre.
No serán avergonzados en el mal tiempo,
Y en los días de hambre serán saciados.
Mas los impíos perecerán,
Y los enemigos de Jehová como la grasa de los carneros
Serán consumidos; se disiparán como el humo.
El impío toma prestado, y no paga;
Mas el justo tiene misericordia, y da.
Porque los benditos de él heredarán la tierra;
Y los malditos de él serán destruidos.
Por Jehová son ordenados los pasos del hombre,
Y él aprueba su camino.
Cuando el hombre cayere, no quedará postrado,
Porque Jehová sostiene su mano.
Joven fui, y he envejecido,
Y no he visto justo desamparado,
Ni su descendencia que mendigue pan.
En todo tiempo tiene misericordia, y presta;
Y su descendencia es para bendición.
Apártate del mal, y haz el bien,
Y vivirás para siempre.
Porque Jehová ama la rectitud,
Y no desampara a sus santos.
Para siempre serán guardados;
Mas la descendencia de los impíos será destruida.
Los justos heredarán la tierra,
Y vivirán para siempre sobre ella.
La boca del justo habla sabiduría,
Y su lengua habla justicia.
La ley de su Dios está en su corazón;
Por tanto, sus pies no resbalarán.
Acecha el impío al justo,
Y procura matarlo.
Jehová no lo dejará en sus manos,
Ni lo condenará cuando le juzgaren.
Espera en Jehová, y guarda su camino,
Y él te exaltará para heredar la tierra;
Cuando sean destruidos los pecadores, lo verás.
Vi yo al impío sumamente enaltecido,
Y que se extendía como laurel verde.
Pero él pasó, y he aquí ya no estaba;
Lo busqué, y no fue hallado.
Considera al íntegro, y mira al justo;
Porque hay un final dichoso para el hombre de paz.
Mas los transgresores serán todos a una destruidos;
La posteridad de los impíos será extinguida.
Pero la salvación de los justos es de Jehová,
Y él es su fortaleza en el tiempo de la angustia.
Jehová los ayudará y los librará;
Los libertará de los impíos, y los salvará,
Por cuanto en él esperaron.](/_next/image?url=https%3A%2F%2Fimageproxy.youversionapi.com%2F320x320%2Fhttps%3A%2F%2Fs3.amazonaws.com%2Fstatic-youversionapi-com%2Fimages%2Fbase%2F1485%2F1280x1280.jpg&w=640&q=75)
Deléitate asimismo en Jehová, Y él te concederá las peticiones de tu corazón. Encomienda a Jehová tu camino, Y confía en él; y él hará. Exhibirá tu justicia como la luz, Y tu derecho como el mediodía. Guarda silencio ante Jehová, y espera en él. No te alteres con motivo del que prospera en su camino, Por el hombre que hace maldades. Deja la ira, y desecha el enojo; No te excites en manera alguna a hacer lo malo. Porque los malignos serán destruidos, Pero los que esperan en Jehová, ellos heredarán la tierra. Pues de aquí a poco no existirá el malo; Observarás su lugar, y no estará allí. Pero los mansos heredarán la tierra, Y se recrearán con abundancia de paz. Maquina el impío contra el justo, Y cruje contra él sus dientes; El Señor se reirá de él; Porque ve que viene su día. Los impíos desenvainan espada y entesan su arco, Para derribar al pobre y al menesteroso, Para matar a los de recto proceder. Su espada entrará en su mismo corazón, Y su arco será quebrado. Mejor es lo poco del justo, Que las riquezas de muchos pecadores. Porque los brazos de los impíos serán quebrados; Mas el que sostiene a los justos es Jehová. Conoce Jehová los días de los perfectos, Y la heredad de ellos será para siempre. No serán avergonzados en el mal tiempo, Y en los días de hambre serán saciados. Mas los impíos perecerán, Y los enemigos de Jehová como la grasa de los carneros Serán consumidos; se disiparán como el humo. El impío toma prestado, y no paga; Mas el justo tiene misericordia, y da. Porque los benditos de él heredarán la tierra; Y los malditos de él serán destruidos. Por Jehová son ordenados los pasos del hombre, Y él aprueba su camino. Cuando el hombre cayere, no quedará postrado, Porque Jehová sostiene su mano. Joven fui, y he envejecido, Y no he visto justo desamparado, Ni su descendencia que mendigue pan. En todo tiempo tiene misericordia, y presta; Y su descendencia es para bendición. Apártate del mal, y haz el bien, Y vivirás para siempre. Porque Jehová ama la rectitud, Y no desampara a sus santos. Para siempre serán guardados; Mas la descendencia de los impíos será destruida. Los justos heredarán la tierra, Y vivirán para siempre sobre ella. La boca del justo habla sabiduría, Y su lengua habla justicia. La ley de su Dios está en su corazón; Por tanto, sus pies no resbalarán. Acecha el impío al justo, Y procura matarlo. Jehová no lo dejará en sus manos, Ni lo condenará cuando le juzgaren. Espera en Jehová, y guarda su camino, Y él te exaltará para heredar la tierra; Cuando sean destruidos los pecadores, lo verás. Vi yo al impío sumamente enaltecido, Y que se extendía como laurel verde. Pero él pasó, y he aquí ya no estaba; Lo busqué, y no fue hallado. Considera al íntegro, y mira al justo; Porque hay un final dichoso para el hombre de paz. Mas los transgresores serán todos a una destruidos; La posteridad de los impíos será extinguida. Pero la salvación de los justos es de Jehová, Y él es su fortaleza en el tiempo de la angustia. Jehová los ayudará y los librará; Los libertará de los impíos, y los salvará, Por cuanto en él esperaron.
Salmos 37:4-40