Sofonías 1:12-18
Sofonías 1:12-18 Reina Valera Contemporánea (RVC)
«Cuando llegue el momento, yo examinaré con linterna a Jerusalén, y castigaré a los que se hallan en tranquilo reposo y asentados como el vino. Castigaré a esos que dentro de sí piensan: “El Señor no hace bien ni hace mal.” Por pensar así, sus bienes serán saqueados y sus casas serán derribadas. Construirán casas, pero no llegarán a habitarlas; plantarán viñas, pero no llegarán a beber su vino.» Ya está cerca el gran día del Señor. Ya está cerca, muy cerca. Será un día de amargura y de gran estrépito, en el que hasta los valientes pedirán ayuda. Será un día de ira, de angustia y de estrechez; día de alboroto y destrucción, día de oscuridad y tinieblas, día nublado y sombrío, día de sonido de trompetas, de gritos de guerra contra las ciudades fortificadas y contra las desafiantes torres. »Yo afligiré a los mortales. Por haber pecado contra mí andarán como ciegos; su sangre será esparcida como el polvo, y su carne será como estiércol.» En el día de la ira del Señor, nada podrá librarlos. Ni su plata ni su oro, porque toda la tierra será consumida por el fuego de su enojo. En un abrir y cerrar de ojos, el Señor destruirá a todos los habitantes de la tierra.
Sofonías 1:12-18 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
En aquel tiempo registraré Jerusalén con lámparas para castigar a los que reposan tranquilos como vino en su sedimento, a los que piensan: “El SEÑOR no va a hacer nada, ni para bien ni para mal”. En botín se convertirán sus riquezas; sus casas quedarán en ruinas: “Edificarán casas, pero no las habitarán; plantarán viñas, pero del vino no beberán”. SEÑOR »Ya se acerca el gran día del SEÑOR; a toda prisa se acerca. El clamor del día del SEÑOR será amargo y aun el más valiente gritará. Día de ira será aquel día, día de aflicción y angustia, día de ruina y destrucción, día de tinieblas y penumbra, día de niebla y densa oscuridad, día de trompeta y grito de batalla contra las ciudades fortificadas, contra las torres altas. »Traeré tal angustia a todo el pueblo que andarán como ciegos, porque pecaron contra el SEÑOR. Su sangre será derramada como polvo y sus entrañas como estiércol. No los podrán librar ni su plata ni su oro en el día de la ira del SEÑOR.
Sofonías 1:12-18 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
»Cuando llegue ese día, tomaré una lámpara y buscaré en la ciudad de Jerusalén a los que viven tranquilos; cuando los encuentre, los castigaré. Se parecen al vino que se pone a reposar, y hasta se atreven a decir: “¡Dios no hace nada bueno, pero tampoco hace nada malo!” Construyeron casas, pero no habitarán en ellas; cultivaron viñas, pero no beberán el vino; ¡sus riquezas les serán quitadas, y sus casas serán destruidas! »¡Ya se acerca el gran día en que vendré a castigarlos! ¡Se acerca con gran rapidez! ¡Ese día se oirán gritos tan horribles que hasta los más valientes llorarán! Será un día de gran enojo, un día de aflicción y angustia, un día de completa destrucción, un día de grandes nubarrones, un día de profunda oscuridad. Entre gritos y toques de trompeta, ese día se dará la orden de ataque contra las ciudades amuralladas y contra sus altas torres. »Todos han pecado contra mí. Por eso haré que se angustien y que caminen como ciegos. Su sangre se esparcirá como el polvo, y sus cuerpos se volverán estiércol. El día que yo me enoje, le prenderé fuego a la tierra. No habrá nada que los salve; ¡ni siquiera su oro y su plata! ¡En un instante serán destruidos todos los que habitan este mundo!»
Sofonías 1:12-18 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
»En aquel tiempo tomaré una lámpara y registraré Jerusalén. Castigaré entonces a la gente que se siente tranquila como el vino reposado, y que se dice a sí misma: “¡El Señor no hará nada, ni bueno ni malo!” Por eso, sus tesoros serán saqueados y sus casas destruidas. Construirán casas, pero no vivirán en ellas; plantarán viñas, pero no beberán de su vino.» ¡Ya está cerca el gran día del Señor! ¡Ya está cerca, viene de prisa! El estruendo del día del Señor será amargo: ¡hasta los más valientes gritarán entonces! Será un día de ira, de angustia y aflicción, de ruina y desolación, de oscuridad y tinieblas, de nublado y sombras profundas; será un día de trompeta y de clamor contra las ciudades fortificadas y sus altas torres. Dice el Señor: «Pondré en apuros a la gente. Caminarán como ciegos, porque pecaron contra mí. Su sangre será derramada como polvo, y su carne amontonada como estiércol.» En el día de la ira del Señor, no salvará a la gente ni su plata ni su oro, porque el fuego del enojo del Señor consumirá todo el país. ¡Todos los habitantes de la tierra quedarán destruidos en un solo instante!
Sofonías 1:12-18 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Acontecerá en aquel tiempo que yo escudriñaré a Jerusalén con linterna, y castigaré a los hombres que reposan tranquilos como el vino asentado, los cuales dicen en su corazón: Jehová ni hará bien ni hará mal. Por tanto, serán saqueados sus bienes, y sus casas asoladas; edificarán casas, mas no las habitarán, y plantarán viñas, mas no beberán el vino de ellas. Cercano está el día grande de Jehová, cercano y muy próximo; es amarga la voz del día de Jehová; gritará allí el valiente. Día de ira aquel día, día de angustia y de aprieto, día de alboroto y de asolamiento, día de tiniebla y de oscuridad, día de nublado y de entenebrecimiento, día de trompeta y de algazara sobre las ciudades fortificadas, y sobre las altas torres. Y atribularé a los hombres, y andarán como ciegos, porque pecaron contra Jehová; y la sangre de ellos será derramada como polvo, y su carne como estiércol. Ni su plata ni su oro podrá librarlos en el día de la ira de Jehová, pues toda la tierra será consumida con el fuego de su celo; porque ciertamente destrucción apresurada hará de todos los habitantes de la tierra.
Sofonías 1:12-18 La Biblia de las Américas (LBLA)
Y sucederá en aquel tiempo que yo escudriñaré a Jerusalén con lámparas, y castigaré a los hombres que reposan como el vino en sus heces, los que dicen en su corazón: «Ni bien ni mal hará el SEÑOR». Sus riquezas se convertirán en despojos, y sus casas en desolación; edificarán casas, mas no las habitarán, plantarán viñas, mas no beberán su vino. ¶Cercano está el gran día del SEÑOR, cercano y muy próximo. El clamor del día del SEÑOR es amargo; allí gritará el guerrero. Día de ira aquel día, día de congoja y de angustia, día de destrucción y desolación, día de tinieblas y lobreguez, día nublado y de densa oscuridad, día de trompeta y grito de guerra contra las ciudades fortificadas y contra los torreones de las esquinas. Traeré angustia sobre los hombres, y andarán como ciegos, porque han pecado contra el SEÑOR; su sangre será derramada como polvo, y su carne como estiércol. Ni su plata ni su oro podrán librarlos en el día de la ira del SEÑOR, cuando por el fuego de su celo toda la tierra sea consumida; porque Él hará una destrucción total y terrible de todos los habitantes de la tierra.
Sofonías 1:12-18 Nueva Traducción Viviente (NTV)
»Buscaré con linternas en los rincones más oscuros de Jerusalén para castigar a quienes descansen cómodos con sus pecados. Piensan que el SEÑOR no les hará nada, ni bueno ni malo. Por eso serán despojados de sus posesiones, y sus casas serán saqueadas. Construirán nuevas casas, pero nunca vivirán en ellas. Plantarán viñedos, pero nunca beberán su vino. »Ese terrible día del SEÑOR está cerca. Viene de prisa, un día de llanto amargo, un día cuando aun los hombres fuertes clamarán. Será un día cuando el SEÑOR derramará su ira, un día de terrible aflicción y angustia, un día de ruina y desolación, un día de oscuridad y penumbra, un día de nubes y de negrura, un día de sonido de trompeta y gritos de batalla. ¡Caen las ciudades amuralladas y las más sólidas fortificaciones! »Por haber pecado contra el SEÑOR, los haré andar a tientas como el ciego. Su sangre será vertida en el polvo y sus cuerpos quedarán pudriéndose sobre la tierra». Ni su plata ni su oro los salvará en el día de la ira del SEÑOR. Pues toda la tierra será devorada por el fuego de su celo. Él dará un final aterrador a toda la gente de la tierra.